La Secretaría de Bienestar de Nueva Canarias en Lanzarote ha denunciado la "medida que supuestamente tomará la Gerencia de los Servicios Sanitarios del Área de Salud de Lanzarote", que consistiría en el traslado de la ambulancia medicalizada ubicada en el Hospital Molina Orosa a una nueva base situada en la zona industrial de Argana Baja. Una decisión que considera "incoherente" y que advierte que podría repercutir "en la vida de las personas".
En un comunicado, NC recuerda que Lanzarote cuenta únicamente con dos ambulancias medicalizadas, una en el consultorio de Playa Blanca desde el año 2017, y una con base en el Hospital Dr. José Molina Orosa desde que se implantó en la isla este servicio.
"Una ambulancia medicalizada cuenta con dos técnicos de emergencias sanitarias, donde uno realiza funciones de conductor. Además, cuenta con un equipo sanitario comprendido por un enfermero y un médico. Este tipo de vehículo es activado por la sala del 112 desde Gran Canaria, cuando el centro coordinador es alertado por una llamada de emergencia de riesgo vital, como por ejemplo una sospecha de (IAM) infarto agudo de miocardio, un tráfico con pacientes politraumatizados, una (PCR) parada cardiorrespiratoria, etc; donde el tiempo de reacción y asistencia es vital para lograr una supervivencia del paciente a la llegada de la ambulancia", explica.
Asimismo, la formación apunta que "todas las recomendaciones y guías en materia de emergencias van dirigidas a acortar los tiempos de reacción y asistencia a un paciente en estado crítico", señalando que "es por ello que se recomienda que las unidades medicalizadas cuenten con el equipo técnico y sanitario juntos en una misma base como hasta ahora así ha sido en nuestro Hospital Dr. Jose Molina Orosa, y como funcionan el resto de las unidades medicalizadas de Canarias"
"Supondrá un aumento del tiempo de respuesta"
Sin embargo, afirma que "supuestamente la planificación de la Gerencia contempla quitar el vehículo medicalizado con base en el Hospital, y trasladar la ambulancia y técnicos de emergencias a una nueva base situada en la zona industrial de Argana Baja, mientras el enfermero y médico permanecen localizados en el Servicio de Urgencias del Hospital". "¿Que supondrá esta decisión al conjunto de la sociedad lanzaroteña? Pues que por ejemplo, cuando el centro coordinador reciba una llamada de una posible parada cardiorrespiratoria, el 112 avisará conjuntamente a técnicos de emergencia y a equipo sanitario, pero el médico y el enfermero tendrán que esperar en las puertas del recinto hospitalario a que llegue la ambulancia desde la base de la zona industrial de Argana Baja", señalan desde NC.
Al respecto, la formación advierte que "dependiendo del tráfico que se acumule en la carretera de servicio de un único carril que conduce al Hospital", ello "puede suponer minutos y tiempo de más perdidos que supondrán un aumento del tiempo de respuesta, y con ello proporcionalmente un descenso del porcentaje de supervivencia del paciente en riesgo vital". "Por ejemplo, en caso de una parada cardiorrespiratoria, los primeros 4 minutos desde el inicio de la parada cardiaca hasta la asistencia de servicios de emergencia en el lugar, aumentan exponencialmente las probabilidades de supervivencia, a partir de ese tiempo desciende considerablemente las posibilidades de sobrevivir", añande desde NC, desde donde consideran que "no puede el equipo sanitario esperar esos cuatro minutos de oro a que llegue la ambulancia de una base a kilómetros fuera del Hospital Doctor José Molina Orosa por problemas supuestamente de espacio y que con ello repercuta en la vida de las personas".
Según NC, el motivo por el cuál supuestamente tienen planificada esta "incoherente decisión", es "por falta de espacio donde ubicar la ambulancia y la base de los técnicos de emergencias". Sin embargo, la formación cree que "se debe estudiar toda opción posible para que se mantenga la base de la ambulancia medicalizada en el centro hospitalario, garantizando la unidad del equipo técnico y sanitario, y con ello conseguir una respuesta rápida y eficaz en caso de un aviso por demanda de asistencia crítica".
"Esperamos por el bien de la sociedad lanzaroteña que la Gerencia recapacite, se paralice esta decisión que nos parece completamente ilógica y se busque un espacio físico en el centro hospitalario que no perjudique los tiempos de respuesta y con ello las probabilidades de supervivencia", reclama NC.