El verano, como todo lo bueno, llega a su fin. Los trabajadores vuelven de las vacaciones para incorporarse a la nada apetecible, pero necesaria, rutina laboral. Atrás quedan los despreocupados días en la playa y las agradables tardes a la sombra de un chiringuito. Para los más jóvenes también se acaban unas largas vacaciones estivales. Y ese día llegó ayer para los alumnos de Secundaria de la Isla.
Un claustro de 25 profesores
Miles de chicos han desembarcado en sus respectivos centros para acomodarse de nuevo a los estudios. La semana pasada le tocó a los más pequeños y esta semana es el turno de los chavales de entre 12 y 16 años, alumnos de la Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO).
La principal novedad de este año es la apertura de un nuevo centro de ESO en la localidad turística de Puerto del Carmen, cuyos habitantes tenían que desplazarse hasta ahora hasta el Instituto de Tías para completar su educación. El nuevo centro ya tiene asignado un claustro de 25 profesores. Las obras están finalizadas al 100% y con él se pretende desahogar al instituto de Tías, que ha estado prácticamente masificado, y cubrir las expectativas de la zona, ya que hasta ahora Puerto del Carmen no tenía instituto.
211 alumnos matriculados
Un total de 211 alumnos están matriculados este año en el Instituto de Puerto del Carmen, siendo de momento el centro con menos estudiantes de la Isla. Nueve son los grupos que ocuparán durante este año académico las aulas del centro.
Los alumnos del nuevo centro se incorporan a las clases de forma gradual. Ayer llenaron los pasillos del edificio recién estrenado los chinijos que cursarán 1º de la ESO, mientras que hoy desembarcan en el IES el resto de los estudiantes, de 2º y 3º de la ESO. Por su parte, los alumnos de 4º de la ESO del municipio terminarán las clases en su antiguo centro, para no romper la continuidad lógica en el último año de la formación secundaria.
"Los alumnos que tienen que empezar 4º de la ESO están a un año de terminar y es normal que se les respete la plaza del instituto de Tías, para que terminen donde empezaron", explicó el director insular de Educación, Juan Cruz Sepulveda. El año que viene ya se incluirá 4º de ESO en el I.E.S. Puerto del Carmen. "Es una cuestión de lógica, han estado durante cuatro en el instituto de Tías y por un año no se va a interrumpir el proceso que ya iniciaron con el profesorado, con su grupo, etcétera".
Por lo tanto, todos los estudiantes residentes en Puerto del Carmen que tienen que empezar este año 1º, 2º, o 3º de ESO tienen plaza adjudicada en el nuevo instituto y con ellos no hay ningún problema.
No obstante, la semana pasada varios estudiantes de Puerto del Carmen se dirigieron a este diario para protestar por tener que seguir asistiendo al centro de Tías, a pesar de que este año la localidad turística estrena nuevo instituto. El director insular de Educación señaló ayer que "a día de hoy no hay ninguna reclamación de los alumnos de Tías al respecto de ese tema". El Director Insular de Educación pidió a los alumnos descontentos que se pongan en contacto con él y asegura que les recibirá encantado.
Cruz Sepulveda añadió en declaraciones a este diario que la incorporación de los estudiantes de diversas modalidades se está llevando a cabo de manera gradual.
Ayer comenzaron las primeras clases los alumnos de ESO, mientras que a partir de próximo miércoles, 14 de septiembre, llegarán a las aulas los estudiantes de Bachillerato Superior y los diferentes ciclos formativos. Por otra parte, el resto de los centros educativos de la Isla comenzarán las clases el próximo jueves.
Régimen de adaptación de los alumnos
Pero no empezaron ayer las clases. Ni tampoco lo harán hoy. De hecho, nadie sabe cuando los alumnos entrarán en materia, porque cada centro tiene la libertad de organizar el programa como mejor le parezca. Y así, esta semana será un día de clases de diez o viente minutos donde los estudiantes apuntarán los horarios y los nombres de sus profesores. Lo podríamos llamar aclimatización, pero según algunos especialistas ayuda a la adaptación de los chavales a la dura rutina, pero también se podría pensar que ayuda algo al absentismo escolar, al menos en las primeras semanas del curso académico.
