La Policía Nacional recibe al año "tres o cuatro" órdenes de detención europeas, como la que la semana pasada acabó con el arresto de un joven de 25 años, uno de los fugitivos más buscados en Holanda. "No son muy frecuentes, pero sí suelen llegarnos estas órdenes de detención. Nos volcamos en ellas para evitar que el individuo cometa una serie de actividades ilícitas aquí", afirmó el comisario jefe de la Comisaría de la Policía Nacional en Arrecife, Federico Teodoro, en Radio Lanzarote-Onda Cero.
Teodoro explicó cómo se llevó a cabo la detención de este joven, natural de Palestina. "Nos lo comunicaron a través de la central de Madrid. Ellos nos informan de las personas más buscadas por si hay un peligro evidente incluso para la sociedad donde residen. Había datos que nos apuntaban a que podía estar en la zona de Puerto del Carmen, relacionado con la prostitución. También sabíamos que era un amante de las boleras", afirmó.
Agentes de la Policía Nacional montaron un dispositivo y lograron localizar a este joven en Puerto del Carmen en la noche del miércoles 26 de junio. "Pidieron refuerzos y se procedió a su detención sin problema alguno", informó el comisario jefe. "Tuvimos conocimiento el martes y al día siguiente ya estaba detenido".
El detenido, que utilizaba cinco identidades distintas, fue localizado por los agentes fácilmente, ya que tenían su foto. "Contábamos con esa ventaja. Cuando se vio que se le echaban encima, porque con gente violenta hay que actuar rápido, él mismo preguntó qué pasaba, pero ya lo entendió enseguida. Sabía por qué estábamos ahí y nos dio su verdadero nombre", señaló Federico Teodoro.
"Las dejaba sin respiración"
Teodoro indicó que el detenido estaba "relacionado con el mundo de la prostitución". "A las mujeres que atracaba, casi las estrangulaba. Las dejaba sin respiración hasta que se quedaban desmayadas y les robaba todo lo que podía", informó.
Por suerte, la Policía Nacional no tiene constancia de que en Lanzarote cometiera ninguno de los delitos de los que está acusado en Holanda. "Sabemos que llevaba unos dos o tres meses aquí, pero no tenemos constancia de ningún delito en la isla", afirmó el comisario, aunque señaló que el detenido no quiso declarar en la isla de Lanzarote, desde donde fue enviado a la Audiencia Nacional, en Madrid.
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