"Una debacle". Esto supondría para el Partido Popular que no se permita la circulación en la Avenida Marítima de Arrecife. El partido ya señaló el pasado mes de agosto que sería un "error" llevar a cabo ese cierre y ahora su presidenta insular, Astrid Pérez, ha vuelto a insistir en las "graves consecuencias económicas" que cree que acarrearía para los comerciantes de Arrecife el "cierre definitivo" de esta vía, "mientras no existan alternativas al mismo". Pide que mientras se decide, se abra aunque sea en un solo sentido.
Para Astrid Pérez, "el cierre de una de las vías más importantes de la ciudad hace tambalear el futuro a corto y medio plazo del sector comercial de la zona centro de la capital, en favor de las grandes superficies". "Por mucho que el grupo de Gobierno municipal quiera adornar la situación hablando de peatonalización y recuperar la ciudad para los peatones, lo cierto es que a día de hoy no hay alternativas al tráfico rodado por lo que plantear el cierre es un auténtico disparate", recalca Pérez.
"Las obras que se desarrollan en la capital, la falta de aparcamientos y la mala señalización convierten a Arrecife en un auténtico caos y en una ciudad cada vez menos atractiva para aquellos que desean realizar compras", apunta. "Si Arrecife no dispone de unos buenos accesos y no es una ciudad cómoda, desde el punto de vista de la movilidad, es evidente que el cierre de la Avenida se convertirá en un elemento disuasorio en detrimento de los negocios locales y en beneficio de las grandes superficies", reitera.
Moverse en Arrecife, "misión imposible"
A juicio de Astrid Pérez, esto "no parece preocupar al equipo de Gobierno, que sigue creyendo que es posible cerrar al tráfico una vía como la Avenida Marítima, por la que circulan más de 20.000 vehículos, sin tener ninguna alternativa, sin informes técnicos y sin un plan de movilidad".
"Desgraciadamente, son cada vez más los ciudadanos que reconocen que sólo vienen al centro de Arrecife cuando no les queda más remedio y, eso, tristemente, es lo peor que puede ocurrirle al tejido comercial de una ciudad", señala la presidenta de los ‘populares’.
"Este efecto disuasorio también se extrapola a los turistas que nos visitan y a los que les resulta prácticamente imposible acceder al centro. Con el caos de tráfico y la mala señalización, es necesario conocer la ciudad para poder moverse por ella. De lo contrario, es misión imposible", apunta Pérez.
Desde el Partido Popular reiteran que lo "más importante" en este momento es abrir la Avenida al tráfico, aunque sea en un sólo sentido. "Mientras se habla, se consulta y se decide, la Avenida no puede estar cerrada ni un día más, perjudicando aún más si cabe a los vecinos y negocios de la zona", concluye la formación.
