El buque Assalama de la Naviera Armas, que inauguró el pasado diciembre la ruta entre Fuerteventura y Tarfaya, permanece en estos momentos sobre un banco de arena a un kilómetro de la costa africana tras haber sufrido un 'toque' en la parte baja del ferry el pasado miércoles. El barco se encuentra ahora en manos de la compañía de seguros, que decidirá si finalmente lo reflota o no, mientras que los 113 pasajeros están siendo trasladados por avión a sus lugares de destino.
El mal estado de la mar y el fuerte viento fueron, en principio, las causas del accidente del Assalama, que en ocasiones presentaba dificultades para maniobrar en un puerto de pequeñas dimensiones como el de Tarfaya.
El responsable de Comunicación de la Naviera Armas, Manuel Vidal, informó este viernes de que el buque registró el pasado miércoles una "avería prudencial que se podía solucionar" cuando salía de Tarfaya hacia Fuerteventura. "Se trajo un remolcador de la zona, no muy potente, y los buzos tuvieron dificultades para trabajar. Se pidió un remolcador a Lanzarote, pero el barco hizo una escora inesperada que podía poner en peligro su flotabilidad y se decidió entonces abandonar el barco".
El Assalama viajaba con 113 pasajeros a bordo. Durante este viernes se está gestionando el traslado de 70 pasajeros a Fuerteventura, Lanzarote y Gran Canaria. Diana Báez, responsable de Marketing de Armas, explicó que la naviera se está haciendo cargo de los gastos de traslados, hospedaje y comida de los pasajeros tanto en El Aaiun como en Canarias. Un total de 9 pasajeros volaron en la tarde del jueves desde El Aaiun a Gran Canaria. En la noche de ese día, la Naviera Armas fletó un avión de Binter Canarias de 72 plazas "pero sólo quisieron volar 25 personas", indica Báez. El resto prefirió quedarse en hoteles de El Aaiun.
Los que viajaron a Gran Canaria se hospedaron en un hotel de Las Palmas de Gran Canaria y están siendo trasladados a Fuerteventura, Lanzarote y Tenerife Sur. En cuanto a las personas que permanecieron en El Aaiun, Diana Báez afirma que "se les va a comprar el billete a todos los que quieran venir".
El "Assalama" es un ferry de 102 metros de eslora, 18,5 metros de manga y 4,90 metros de calado. Tiene 510 plazas para pasajeros (29 camarotes dobles), 350 metros lineales de carga (160 coches), salones, bar, piscina y self service. Este buque, el último de los antiguos de la naviera, fue remozado durante tres meses en los astilleros de Ferrol.
Se desconoce cuál será el futuro de la línea Tarfaya-Fuerteventura de la Naviera Armas. Eso sí, la compañía se plantea adelantar el servicio de Lanzarote-Agadir para antes del verano, tal como señaló Manolo Vidal. De hecho, este jueves llegó a Tenerife un nuevo barco, el Volcán de Tijarafe, de mil pasajeros y 650 coches, es decir, similar al Volcán de Tamadaba que unirá Lanzarote con Agadir próximamente.
