La Agencia de Protección del Medio Urbano y Natural (APMUN) ha precintado la montaña de El Chupadero, ubicada en La Geria. El cierre de esta montaña se produce por la existencia de ocho expedientes por la extracción de rofe que se estaba llevando a cabo en este lugar, según han confirmado a La Voz de Lanzarote desde la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación Territorial del Gobierno de Canarias.
Según estas mismas fuentes, "ha sido suspendida la actividad" en esta montaña. No obstante, no han querido precisar ni quién ha ordenado precintar El Chupadero ni quién ha emitido dichos expedientes. Tan sólo se han limitado a asegurar que "hay abiertos ocho expedientes por la extracción de picón" y, por ello, se ha precintado la montaña.
Esta montaña ha estado desde hace años rodeada de polémica. La asociación El Guincho había denunciado la extracción supuestamente ilegal de picón en este espacio natural protegido de La Geria. En su momento, este colectivo incluso denunció ante los medios de comunicación que "se estaban llevando la arena de la ladera de la montaña".
Esta denuncia le costó a uno de los miembros de El Guincho, Bernabé García, una querella por parte de los propietarios de la finca. Así, Lorenzo Viñoly y Carlos García demandaron a Bernabé, que este martes ha confirmado a La Voz que le piden "50.000 euros por difamación".
Un informe del Cabildo
Mientras El Guincho ponía de manifiesto las presuntas ilegalidades llevadas a cabo en esta montaña, sus propietarios aseguraban que contaban con el visto bueno tanto del Ayuntamiento de Yaiza como del Cabildo, indicando que tenían una calificación territorial para "la mejora de una finca agrícola abandonada".
Así, existe un informe del Cabildo de Lanzarote, firmado por el entonces consejero Carlos Espino y por el jefe de Servicio de Medio Ambiente, Luis Pascual, en el que se responde a la solicitud de estos dos propietarios, que solicitaron "la modificación de condiciones de la Calificación Territorial otorgada para la reconversión de finca agrícola en la Montaña Chupaderos".
Este informe, fechado el 28 de agosto de 2008, dice que una vez "realizada la visita de inspección por personal técnico de este servicio, se ha podido comprobar que la ejecución de los trabajos de mejora de las condiciones de la finca se ha llevado a cabo conforme a lo solicitado y a las condiciones recogidas enla correspondiente Calificación Territorial, manteniendo las características y peculiaridades del singular sistema de cultivo del Paisaje Protegido".
"Un sobrante de arena"
En este documento, se informa de que "como consecuencia de la reestructuración se ha producido un sobrante de arena" y se advierte de que éste "no podrá ser utilizado en la propia finca".
En este sentido, el Cabildo se pronunció de forma favorable "a la extracción de este material sobrante de la finca". Eso sí, bajo unos requisitos. Así, estableció que "la totalidad del material deberá ser dedicado a la actividad agrícola y que los promotores de la actuación deberán presentar relación de fincas incluyendo datos de propiedad y cantidades de arena, de la que se dará traslado al Servicio de Medio Ambiente del Cabildo de Lanzarote".
Sin embargo, el precinto ordenado ahora por la APMUN podría obedecer a que no se respetaron las condiciones establecidas en ese permiso. La denuncia planteada en su momento por El Guincho sostenía que no sólo se estaba dando uso al picón sobrante de las obras en esa finca, sino que se estaban haciendo extracciones de rofe para su venta.
