El Cabildo culmina el proyecto para rehabilitar la plaza de Las Palmas en Arrecife

La iniciativa contempla eliminar la placa con el símbolo de la falange, que conmemoraba la visita del dictador Francisco Franco a la capital

29 de abril de 2024 (16:40 CET)
Actualizado el 29 de abril de 2024 (16:41 CET)
La plaza de Las Palmas de Arrecife
La plaza de Las Palmas de Arrecife

El Cabildo de Lanzarote ha informado este lunes de que ha culminado el proyecto de rehabilitación de la plaza de Las Palmas y lo ha remitido al Colegio de Arquitectos para su supervisión, tras un acuerdo entre la corporación y el Ayuntamiento de Arrecife.

“Tras años de desacuerdos entre las anteriores administraciones hemos conseguido consensuar un proyecto de rehabilitación para la plaza de la iglesia de San Ginés que recupera el patrimonio histórico y el espíritu de César Manrique”, según apunta el presidente del Cabildo de Lanzarote, Oswaldo Betancort.

“Una vez sea supervisado por el Colegio de Arquitectos el Cabildo de Lanzarote sacará la obra a licitación y adjudicación por un importe de 771.182,57 euros, Igic incluido,  explica la consejera del Departamento de Patrimonio, Ascensión Toledo.

La plaza de Las Palmas, frente a la iglesia de San Ginés de Arrecife, "se encuentra en un gran estado de deterioro provocado fundamentalmente por la acción de las raíces de los árboles ubicados en las jardineras de la plaza que con el tiempo han ido erosionado el pavimento, levantando los adoquines y convirtiendo el espacio en una zona peligrosa para los viandantes", resalta el Cabildo en una nota de prensa.

Para la responsable del Área de Patrimonio Histórico del Cabildo de Lanzarote, Ascensión Toledo, “la plaza volverá a tener la impronta de nuestro artista más universal y será un espacio amable y accesible para peatones y para residentes en la zona”. La consejera agradece “el esfuerzo y el trabajo realizado por los técnicos del Departamento que han tenido que modificar el proyecto en infinidad de ocasiones para intentar compatibilizar los intereses insulares y municipales, y compaginar la protección del patrimonio histórico con el vegetal”.

El acuerdo sobre el proyecto final se ha producido después de varias reuniones mantenidas entre los responsables insulares y municipales en las que han participado el presidente, Oswaldo Betancort, el el vicepresidente, Jacobo Medina, la consejera de Patrimonio, Ascensión Toledo, el alcalde de Arrecife, Yonathan de León, el primer teniente de alcalde, Echedey Eugenio, el concejal de Patrimonio capitalino, Maciot Cabrera, y los técnicos de Patrimonio Histórico Insular que han trabajado en la redacción y posteriores modificaciones del proyecto de rehabilitación.

Uno de los mayores problemas a la horas de resolver la rehabilitación y reforma de la plaza ha venido motivado por su doble protección patrimonial, está en el entorno del Bien de Interés Cultural de la Iglesia de San Ginés, y a su vez se trata de la primera obra urbana realizada por César Manrique en Arrecife en la década de los años 50 del siglo pasado.

Las claves del proyecto 

La rehabilitación de la plaza resuelve la problemática de las jardineras, el pavimento, el monumento de la plaza y el aljibe, así como la reordenación de los accesos, para mejorar la accesibilidad y tránsito de la misma, con la peatonalización de la calle Otilia Díaz.

El proyecto finalmente ha solventado su problema principal, el apartado de las jardineras y del arbolado que ocupa la citada plaza. La casuarina, el árbol de mayor porte de la plaza, será sustituido, dado que constituye un obstáculo insalvable para la rehabilitación del espacio; su tronco ha invadido el murete y las pilastras e impedía reconstruir parte del pavimento afectado por la raíces. Mientras que los dos ficus se mantendrán en las jardineras actuales.

El pavimento de hormigón se sustituirá por piedra, pero manteniendo la misma disposición de cuadrícula del proyecto original de Manrique; se conserva el monumento central, desapareciendo la placa con el símbolo de la falange que conmemoraba la visita del dictador Franco a la capital, en aplicación de la Ley de Memoria Democrática.

El aljibe central, donde históricamente se almacenaba el agua que se traía de Gran Canaria, de ahí el nombre de la plaza de Las Palmas, será remozado, renovando el forjado, y se instalarán lucernarios de vidrio en el pavimento que permitirán ver esa antigua construcción de la década de los años 50.

En cuanto a los exteriores de la plaza, la calle Otilia Díaz será peatonalizada, con acceso rodado exclusivo para residentes, y con la colocación de dos bancos y dos jacarandas.

Toda la iluminación de la plaza se verá mejorada con la instalación de un cuarto de luz en la calle de La Recova, se restauran las farolas antiguas y las lámparas serán reproducciones similares a las que tenía la plaza original, mientras que las luces led darán una iluminación cálida a las jardineras y al monumento.

En el pavimento además se incluirán unas arquetas con acabado de piedra que serán puntos de conexión eléctrica para abastecer de energía a los puestos que se ubican en la plaza durante la celebración del Mercadilllo de los sábados.

LO MAS LEÍDO