Acusa al alcalde de actuar de forma "despótica, arrogante y personal"

Jorge Quintero afirma que abandona su acta de concejal de Teguise por "repugnancia" hacia lo que ha visto durante este tiempo

El todavía concejal de Teguise, Jorge Quintero, ha asegurado este jueves que su renuncia al acta responde a la "repugnancia" que siente por lo que ha visto durante este tiempo como edil, y ...

26 de septiembre de 2013 (21:45 CET)
Jorge Quintero afirma que abandona su acta de concejal de Teguise por repugnancia hacia lo que ha visto durante este tiempo
Jorge Quintero afirma que abandona su acta de concejal de Teguise por repugnancia hacia lo que ha visto durante este tiempo

El todavía concejal de Teguise, Jorge Quintero, ha asegurado este jueves que su renuncia al acta responde a la "repugnancia" que siente por lo que ha visto durante este tiempo como edil, y ha puesto especial énfasis en la tramitación del Plan General de Ordenación del municipio, que considera que se ha aprobado con "vacíos en los informes" y sin la participación de la oposición.

En una rueda de prensa que pretendía ofrecer en el Palacio Spínola, pero que finalmente ha dado en la calle, porque el alcalde no le ha permitido el uso de ese recinto, Quintero ha hablado por primera vez ante los medios, más de un año y medio después de abandonar el PP y pasar al grupo de los no adscritos. Y lo ha hecho con duras críticas hacia otros políticos, hacia el grupo de gobierno y en particular hacia el alcalde, Oswaldo Betancort.

"A modo de despedida y reproche al señor alcalde, he de recordarle que usted no es más que un pasajero en este barco. Su inicial entrada conciliadora en el cargo de responsabilidad que ocupa se ha transformado en despótica, arrogante y personal", señalaba Quintero en el comunicado que ha leído a los medios. Según el edil, "más que velar por los intereses del municipio", el alcalde actúa "siguiendo los personales y partidistas".

"Yo le conmino a velar y defender los intereses de este municipio, aunque sea a costa de no medrar personalmente", le ha lanzado a Betancort. Ante estas declaraciones, Quintero ha asegurado que ha sido el alcalde el que "más le ha decepcionado", puesto que "ningunea y anula a la oposición".

"Conciencia", "repugnancia" y "honrosas excepciones"

Según Quintero, al que sus ex compañeros consideran un tránsfuga desde que en febrero de 2012 abandonó el PP sin renunciar al acta, en este tiempo ha tratado "siempre y en todo momento de cumplir las obligaciones" del cargo, "actuando siempre en conciencia y sin influencia de tipo alguno en el grupo de los no adscritos".

Sin embargo, sostiene que "pretender lo anteriormente expuesto en el ámbito local es cuestión no ya difícil, sino imposible. El interés, ya no partidario sino personal, observando en el tiempo transcurrido, me lleva a abandonar el cargo por, entre otras razones, repugnancia a cuanto he venido observando en quienes ejercen el mismo (con honrosas excepciones)".

"Despropósito del Plan General"

Quintero también ha señalado que el "detonante" que le ha llevado a renunciar a su cargo ha sido la aprobación inicial del Plan General, en cuya votación se abstuvo. "Se nos ha hecho caso omiso de las sugerencias que hemos hecho. Viendo este despropósito no he tenido otro remedio que no ser cómplice de esto", ha señalado.

En este sentido, Quintero ha asegurado que "estaba muy bien" como concejal del grupo de los no adscritos, pero "ha llegado este punto después de la aprobación inicial del Plan General" en el que ya su "conciencia" no le permitía estar "como llave". "Prefiero que sea CC y PSOE los que por su propio mirar aprueben el Plan", ha insistido.

Así, ha afirmado en que los informes técnicos de este Plan General "no están muy claros, hay muchas lagunas y vacíos", pero no ha querido pronunciarse sobre ellos, porque "si hay alguna irregularidad, Fiscalía lo verá".

"Imposiciones" del PP

Quintero también ha justificado su marcha del PP y su paso al grupo de los no adscritos. "No por el hecho de concurrir en dichas listas iba a tener obediencia debida y absoluta a lo que, sin discusión de tipo alguno, me venía impuesto desde dicho partido. El concejal electo debe velar por los intereses generales del municipio, en modo alguno por los del partido, y mucho menos cuando por éste se pretende imponer determinadas líneas de actuación que no admiten discusión. Por eso abandoné las filas del PP, al entender que lo que se me trataba de imponer conculcaba lo que yo entendía satisfacía el interés general", ha afirmado.

No obstante, no ha querido detallar qué tipo de imposiciones le llegaron del Partido Popular, puesto que esto ocurrió "en febrero de 2012, hace mucho tiempo". Lo que sí ha explicado es que este mismo miércoles mantuvo una conversación con la presidenta insular del PP, Ástrid Pérez, que "le agradeció" la entrega del acta.

"Ahora es posible una moción de censura"

Quintero ha recordado que con su marcha "todo cabe", en referencia a una moción de censura, que en su caso tendrían que apoyar PSOE, PIL y PP para poder desbancar del poder a CC, que actualmente gobierna con el PSOE. "Estando yo donde estaba no cabía una moción de censura. Ahora es posible. El PP tiene cuatro concejales, cuatro del PIL y tres del PSOE. Son 11 a 10 de CC. Mientras yo estaba como concejal de los no adscritos no podía ni promulgar ni consensuar una moción de censura. Ahora, es posible. Eso se deja a los partidos de la oposición y al PSOE", ha afirmado.

Incluso, ha señalado que ha habido "algún amago" de moción de censura durante este tiempo, aunque tampoco ha aportado detalles. "Se sabía de todos los vecinos de Lanzarote que estando donde yo estoy no cabía moción. Marchándome es posible. Puede ser que haya o que no", ha indicado.

La política, "una experiencia negativa"

Para Quintero, la experiencia de entrar en la vida política ha sido "negativa". "Volveré a mi puesto de trabajo, intentaré recluirme y olvidarme de la política por completo", ha señalado. Según su opinión, de la política se ve "una cosa desde fuera y otra desde dentro". "No me llevo muy buen concepto de la política", ha asegurado.

Tanto es así, que no cree que en las próximas elecciones de 2015 salga de su casa "para ir a votar". "No creo que merezca la pena", ha manifestado.

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