El acusado de haber abusado sexualmente de dos menores de edad cuando ambas tenían 15 años ha reconocido este martes los hechos ante la Sección Sexta de la Audiencia Provincial y ha aceptado la pena solicitada por la Fiscalía, que la ha rebajado a 7 años de prisión.
Inicialmente, el Ministerio Público pedía para Giovani Hidalgo Herrera 24 años de cárcel (12 por cada una de las víctimas), pero antes de iniciarse la vista han alcanzado un acuerdo por el que el juicio no ha llegado a celebrarse.
“Los hechos son ciertos”, ha respondido el acusado al entrar a la sala, a preguntas del magistrado. “¿Se encuentra arrepentido?”, le ha preguntado el fiscal. “Completamente, sí señor”, ha contestado, añadiendo también que el día en el que ocurrieron los hechos “había consumido alcohol y drogas”.
Al modificar su calificación inicial, el fiscal ha aplicado entre otras atenuantes la confesión y la “reparación del daño”, al haberse comprometido también el acusado a pagar la indemnización que se solicitaba para cada una de las víctimas. Una de ellas deberá recibir 5.000 euros y la otra 10.000, aunque el procesado ha subrayado que no tiene trabajo ni ingresos y que vive de algunas “chapuzas” que realiza y de la “ayuda” de familiares y amigos.
“Mientras pueda económicamente, cumpliré con mis obligaciones legales”, ha asegurado ante la Sección Sexta de la Audiencia. No obstante, también se ha comprometido a entregar este mismo martes 500 euros, según ha subrayado el fiscal, como una primera parte del pago.
En cuanto a la pena, que ahora se recogerá en la sentencia conforme a lo solicitado por el fiscal y lo aceptado por el acusado, se ha fijado en 4 años de cárcel por el delito contra una de las víctimas y en 3 años por la otra. De ese tiempo, se descontarán los meses que ya pasó en prisión provisional tras producirse los hechos, entre mayo de 2019 y julio de 2020.
Además, también tendrá prohibido acercarse a las víctimas o comunicarse de cualquier forma con ellas durante 10 años, así como realizar cualquier trabajo relacionado con menores durante 8 años. Una vez cumplida la pena de prisión, también estará sometido a libertad vigilada, al tratarse de un delito sexual contra menores.
Una de las víctimas estaba en un centro de menores
Los hechos que ha confesado el acusado ocurrieron el 19 de abril de 2019, cuando invitó a las dos víctimas a dormir en su domicilio, “valiéndose de la relación de confianza” que tenía con ellas. Además, una estaba en “especial vulnerabilidad”, “por su situación de desprotección y desarraigo familiar, al estar ingresada en un centro de menores de la localidad de Arrecife”.
El escrito de acusación que ha reconocido íntegramente el procesado señala que una vez en la vivienda, “movido por su atracción sexual hacia los menores de edad, con ánimo de mantener relaciones sexuales y satisfacer así su ánimo libidinoso, les ofreció tener sexo con él a cambio de dinero, aceptando ellas dicha propuesta”.
Como consecuencia de lo ocurrido, la Fiscalía señala que una de las menores presenta “síntomas de tipo depresivos, tendencia a la indisciplina y a aislarse por desconfianza hacia los demás”; y la otra “un trastorno adaptativo tipo mixto con ansiedad y depresión, además de sentimientos de culpabilidad y de baja autoestima”.
