La Policía Nacional, en coordinación con la Brigada Central de Estupefacientes (Udyco) y bajo la dirección del Juzgado Central de Instrucción número 3 de la Audiencia Nacional, ha ejecutado una de las mayores operaciones contra el narcotráfico llevadas a cabo en Canarias en los últimos años. Denominada Operación Sombra Negra, la intervención ha culminado con al menos cuarenta personas detenidas, acusadas de pertenencia a organización criminal, tráfico de drogas y blanqueo de capitales. El operativo, aún en curso, se ha desarrollado de forma simultánea en Gran Canaria, Fuerteventura y Lanzarote, y no se descarta que el número de arrestos aumente en los próximos días.
En Lanzarote, se han llevado a cabo varios registros, incluyendo uno en el barrio de Los Pitufos de Arrecife. Las actuaciones se han realizado con un amplio despliegue policial, con agentes desplazados desde Madrid, y han permitido incautar drogas, dinero en efectivo, dispositivos electrónicos y abundante documentación. La organización desmantelada operaba con una estructura muy jerarquizada, desde los cabecillas hasta los camellos, y aplicaba estrictos protocolos para evitar ser descubierta por las fuerzas de seguridad.
El caso permanece bajo secreto de sumario y no han trascendido detalles sobre la cantidad exacta de droga o dinero decomisado. Esta operación se produce apenas medio año después de que otra red dedicada al tráfico de cocaína y heroína entre las islas orientales, y con vínculos con una banda de origen nigeriano, fuera desarticulada con nueve detenciones.
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