Otro de los aspectos que pretenden modificar radicalmente los administradores concursales de Inalsa es el de los horarios de trabajo, que consideran que incumplen incluso la legislación en materia de prevención de riesgos laborales, y los periodos de vacaciones. Con respecto a esto último, en el escrito que han remitido al Juzgado subrayan que todo el personal de producción de Inalsa "concentra sus vacaciones en tres meses del año, saliendo dos turnos juntos cada mes, en la época de mayor producción de la empresa, los meses de julio, agosto y septiembre", que es precisamente cuando aumenta la demanda de agua.
Para poder mantener el servicio durante esa etapa, los trabajadores que no están de vacaciones modifican su calendario de trabajo habitual y reducen los días de descanso. Algo que, según los administradores concursales, podría explicar por qué justo "en esos meses se producen más bajas por incapacidad temporal en dichos departamentos".
En cuanto a los horarios durante el año, los administradores consideran inexplicable que haya turnos tan "dispares" en los centros de Arrecife, Puerto del Carmen y la zona norte centro y sur, considerando que "el servicio que prestan es idéntico". Pero sobre todo, cuestionan cómo se establecen esos turnos, que implican guardias de hasta 16 horas continuadas en tres días alternos, con descansos después de ocho días consecutivos (en el caso de Puerto del Carmen); o jornadas de 12 horas consecutivas durante 7 días, para descansar después 14 días seguidos.
Según sostienen, esto incumple la legislación laboral e implica riesgos para la salud y la seguridad, considerando además que trabajan conduciendo vehículos. Además, subrayan que esos horarios hacen "ineficaz" el servicio, debido a "las lógicas ineficiencias que se producen a partir de determinadas horas consecutivas de trabajo".
Por eso, proponen jornadas "en turnos que no abarquen en ningún caso más de 8 horas consecutivas de trabajo efectivo", así como distribuir las vacaciones del personal en seis meses, de mayo a noviembre, y no de julio a septiembre, como venía haciéndose hasta ahora.
De esta forma, y con las horas que pretenden recuperar en la jornada laboral de cada empleado, también sostienen que se conseguiría ampliar en hora y media diaria la atención al público y el conjunto de servicios que prestan, así como dar "una correcta continuidad del trabajo entre un turno y otro, al coincidir en media hora el entrante con el saliente, realizándose un relevo más eficiente".
