El director del Hospital Insular de Lanzarote, Domingo Guzmán, afirma sentirse "sorprendido" y "disgustado", con las imágenes mostradas acerca de la residencia "Sol de Otoño", por el programa "Diario D". Y es que, aunque reconoce no haber visto el reportaje, sí conoce su contenido.
Así, respecto a las imágenes mostradas por el programa de Cuatro, Guzmán ha apuntado que "no revelan un trato adecuado". Por ejemplo, en el caso de las ataduras, Guzmán afirma que "una sujeción tiene que ser un procedimiento extraordinario y que se haga en casos estrictamente indicado, bien porque haya un riesgo de accidente o caída o porque sea una persona que no tiene una estabilidad para mantenerse en una silla, para mantener bien la postura". "Y tiene que ser con material homologado y con la vigilancia adecuada. No puede ser algo sistemático y no controlado", ha añadido.
El director del Hospital Insular también ha hecho referencia al uso de jeringuillas como método de alimentar a los ancianos,afirmando que se trata de un procedimiento "bastante antiguo". "Si tienes el profesional formado adecuadamente y conoces los productos que hay, que están preparados para no producir atragantamientos, no es necesario. Hay que ver un poco la patología de cada persona. Incluso las personas que tienen muchos problemas para tragar se les puede dar alimento con una cuchara, siempre que el alimento esté bien preparado y tenga una consistencia adecuada y se den con una técnica adecuada para que se puedan tragar", ha señalado al respecto.
En cuanto al uso de la misma jeringuilla o cepillo de dientes para varios ancianos, el director del Hospital insular lo tiene claro. "Es obvio que las personas que están en una residencia, los pacientes, deben tener un material individual y la higiene se debe vigilar muy estrechamente".
Guzmán afirma también no haber visto nunca poner tres pañales. "Los pañales se utilizan en personas que tienen incontinencia y en las residencias, más de la mitad, la tienen. La manera de paliar eso es poner empapadores. Hay muchos tipos absorbentes, algunos con más capacidad de otros. En algunos casos se pueden utilizar dos, uno para la absorción y otro por fuera para asegurar el tema de la higiene por si se escapa un poquito, aunque en general los diseños modernos de empapadores lo absorben prácticamente todo".
El director del Hospital Insular ha hablado asimismo de las características del Haroperidol, medicamento sedante que en las imágenes se ve cómo se suministra a los ancianos. "El Haroperidol es un medicamento de la familia de los neurolépticos y son medicamentos que a veces se utilizan en los pacientes con demencia. Si está indicado por el médico y es una dosis determinada, hay pacientes que lo necesitan, pero tiene que estar siempre prescrito por un médico y administrado por un personal sanitario que sepa cómo se administra y no hacerlo de cualquier forma", ha señalado.
Por último, Guzmán se ha referido a las imágenes en las que se ve a un anciano perdiendo la conciencia y no se llama al médico. "¿Cuándo se debe llamar al 112? El personal que esté allí debe hacerlo cuando se advierte una situación de riesgo y de necesidad. Es una cosa de sentido común. Hay que ver los casos individuales, su diagnóstico, tratamiento y valorar individualmente".
Una nueva residencia
El director del Hospital Insular reconoce que "la oferta de plazas públicas residenciales en la isla ha mejorado, pero se necesitan más". "Las necesidades están por encima y yo creo que sería necesario construir una residencia en Arrecife para paliar esto", ha manifestado.
"En general, la mayoría de los ancianos de la isla viven en casa y hay un gran compromiso y cuidado por parte de las familias, incluso con personas muy dependientes. Luego, evidentemente, existen familias, aunque es algo menor, que no pueden cuidarlos y se ven en la necesidad de acudir a una residencia. Eso, y que hay algunos ancianos que no tienen familia".
En este sentido, Guzmán ha explicado que en el Hospital Insular, en la parte de residencia, hay 47 plazas y están "todas ocupadas".
