Boli, la perra perdida en Haría la pasada noche del lunes, ya está en casa. Según explica su dueña, "apareció en los Valles y gracias a un vecino que la llevó al veterinario y se pudo leer su chip".
Como se recordará, la podenca se encontraba en la plaza de la localidad cuando el animal se asustó por los fuegos artificiales, se soltó del collar y corrió hacia el cementerio del pueblo.