Los viajeros de nacionalidad británica tendrán que escanear sus huellas dactilares y su rostro para entrar en la Unión Europea a partir del próximo otoño.
La medida forma parte del nuevo sistema de sistema de entrada/salida (EES), muy similar al requerido para entrar en Estados Unidos, que se aplicará a los ciudadanos de fuera de la Unión a partir del próximo 6 de octubre.
Los datos biométricos se tomarán la primera vez que un pasajero extracomunitario llegue a territorio de la UE y se verificarán en cada visita subsiguiente, según informa el portal de noticias turísticas hosteltur con base en una información publicada por el diario británico The Times.
La UE define el EES como “un sistema informático automatizado para registrar a los viajeros de terceros países, tanto titulares de visados para estancias de corta duración como viajeros exentos de visado, cada vez que cruzan una frontera exterior de la UE”.
El nuevo sistema reemplazará el sellado manual de los pasaportes y además de los datos biométricos, registrará el nombre del viajero, el tipo de documento de viaje, así como la fecha y en lugar de entrada y salida del territorio comunitario.
