Digitalizar el calibre de una máquina para lograr la precisión milimétrica de un cirujano puede suponer un gran avance en la calidad y el precio de fabricación de un producto. A menudo, pensamos en la tecnología y la innovación como conceptos ajenos o distantes, pero lo cierto es que están mucho más presentes de lo que creemos en los procesos y las labores diarias. Un ejemplo para entenderlo es el caso de INFASA, una empresa conejera del Grupo Faycan dedicada a la fabricación e instalación de carpintería de madera, aluminio y fenólico que ha digitalizado su proceso de corte. Para ello, ha contado con el apoyo del centro de la Red CIDE de la Cámara de Comercio de Lanzarote y La Graciosa, donde le han asesorado para identificar líneas de financiación pública y poder poner en marcha su proyecto, convirtiéndose en caso de éxito.
Digitalizar un corte para ser exactos
Con más de tres décadas de trayectoria y una posición de liderazgo en el sector de la construcción, INFASA decide apostar por la innovación e implanta una máquina tronzadora que incorpora un calibre electrónico que permite medir automáticamente la altura del perfil de aluminio a seccionar y lo ajusta automáticamente al corte, evitando los errores que pueden resultar de la medición a mano y mejorando notablemente la calidad de las uniones de las diferentes piezas de carpintería. Esta tecnología incluye además pantallas de protección integradas, lo que supone una protección muy necesaria para el operario que la manipula ya que le protege de las virutas que salen despedidas a altas temperaturas cuando se efectúan los cortes. Como añadido, cuenta con un sistema que evita generar aceites residuales.
He aquí varios aspectos fundamentales para que se produzca con éxito esa innovación: la introducción de la tecnología para perfeccionar los procesos con una mayor calidad y capacidad de producción; la mejora de las condiciones laborales para las personas que trabajan más protegidas y cómodas; y el respeto al medioambiente, ya que se generan menos desperdicios de los materiales utilizados, debido a la digitalización del calibre y al mayor tamaño del disco que incorpora la nueva tronzadora.
Por su parte, INFASA ha podido orientar su estrategia a mejorar la calidad de los productos y la eficiencia de los procesos. Ha conseguido optimizar el uso de los recursos materiales con la reducción de costes que conlleva, aumentado la productividad y generado nuevos empleos. La empresa tiene más de 18 empleados y dos naves industriales. Entre sus próximas actuaciones innovadoras, está la implementación de una solución integral de software compuesta por módulos para mejorar la automatización de la gestión comercial y financiera.
La Red CIDE es una iniciativa de la Consejería de Economía, Conocimiento y Empleo del Gobierno de Canarias, impulsada a través de la Agencia Canaria de Investigación, Innovación y Sociedad de la Información (ACIISI), y cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional, con una tasa de cofinanciación del 85% en el marco del Programa Operativo FEDER Canarias 2014‐2020.
