Este lunes 28 de julio se ha presentado la recién creada Asociación Lanzaroteña de Vendedores Ambulantes (ALVA), cuyo objetivo principal es “crear una comunidad sólida que pueda hacer frente a los desafíos del sector y construir un futuro más próspero y seguro para todos los vendedores ambulantes en Lanzarote”.
La asociación, que ya cuenta con más de cien socios, busca establecer un diálogo constructivo con las Administraciones Públicas para “promover la regulación y el reconocimiento de la venta ambulante como una actividad profesional”.
ALVA también quiere “fomentar la creación de una comunidad de vendedores ambulantes que compartan conocimientos, experiencias y recursos”, así como “fortalecer su posición en mercados públicos y privados”.
Desde la Asociación, explican que ALVA surge para “dar respuesta a los desafíos y problemas que enfrentamos en el mercadillo municipal de Teguise, ante la necesidad de regenerar la transparencia y eficiencia en la aplicación de las normas y regulaciones”.
“Queremos conseguir mayor equidad en nuestras condiciones laborales y de seguridad. La venta ambulante es una actividad económica legítima y profesional que requiere habilidad, dedicación y esfuerzo”, añaden.
“Nos gustaría conseguir que la preservación de la tradición y la incorporación de elementos modernos y tecnológicos puedan coexistir para mejorar la eficiencia y la experiencia del cliente” en los mercadillos de Lanzarote.
ALVA también quiere contribuir a la implementación de “prácticas sostenibles que beneficien al medio ambiente y a la comunidad”.
