Hecher Sosa cumplió su gran sueño al ganar por decisión unánime a Mackson Lee en el Dana White’s Contender Series, lo que le abrió las puertas de la UFC.
El luchador lanzaroteño, conocido como El Guanche Warrior, llegó a la pelea con un peso emocional enorme tras perder a su padre apenas dos días antes del combate. Con la fuerza que le inspira su familia, Sosa dominó sobre el octágono y conquistó al propio Dana White, quien le dedicó un mensaje especial reconociendo que su apellido “significará algo un día”.
Durante el enfrentamiento, Sosa mostró temple y agresividad: resistió un inicio complicado con las patadas de Lee, respondió con poderosos derechazos y llevó la pelea al suelo con su característico ground and pound.
Aunque el brasileño intentó revertir la situación con una guillotina peligrosa y contraataques en el último asalto, el canario mantuvo la presión constante con golpes, clinch y derribos que lo dejaron por delante en las tarjetas.
Finalmente, la victoria no solo aseguró su entrada en la UFC, sino que también le permitió rendir homenaje a su hermana, también fallecida, y a su padre, convirtiendo la velada en un triunfo personal y deportivo histórico.