El presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, ha apoyado este viernes la creación de un 'pasaporte sanitario' que incluya un certificado de vacunación de Covid-19 para no "repetir los errores del verano pasado y poder reactivar el turismo en verano con todas las garantías sanitarias".
En declaraciones a los periodistas tras asistir a la presentación del proyecto de interconexión eléctrica submarina entre las islas de Tenerife y La Gomera, ha comentado que ya había trasladado esa iniciativa a los secretarios de Estado de la Unión Europea y la España Global para que se ponga en marcha cuando la campaña de vacunación se despliegue en toda su intensidad y la pandemia de coronavirus esté controlada.
"No podemos repetir lo del verano pasado", ha comentado, poniendo como ejemplo que hubo países que cerraban sus fronteras, otros pedían PCR o antígenos a la entrada y algunos hasta decretaban cuarentenas.
En su opinión, "es lo peor que puede pasar", por lo que ha pedido "con humildad" a la UE y a la presidenta de Alemania, Angela Merkel, "que se pongan de acuerdo en un marco común" de movilidad y que además sea trasladado a otros territorios internacionales.
El presidente canario ha recordado que su Gobierno lo pidió "desde el primer momento" e incluso puso en marcha un decreto turístico de control de viajeros que "funcionó bien", y ahora espera que definitivamente salga adelante este 'pasaporte' y no haya "desgastes" en las negociaciones.
"Todos dependemos del turismo y la gente está deseosa de tener disfrute y ocio, se lo merece, también trabajo", ha indicado, sin obviar que aún "quedan meses duros" y hay que "contener" la evolución de la pandemia para que "las cosas vayan a mejor" en el segundo semestre.
Ante la cercanía de la 'Semana Santa', ha comentado que cada vez que se acerca un periodo vacacional "se encienden las alarmas" porque aumenta el tiempo libre y hay más reagrupamientos familiares por lo que apela a que se impongan "normas estatales" de control y también la "responsabilidad" de la sociedad.
Así, ha apuntado que serán "exigentes" y se adelantarán en la toma de decisiones para evitar que el disfrute de la Semana Santa se pague en las semanas siguientes.