"Por responsabilidad personal ante los que confiaron en nosotros y por dignidad, no cederemos ni a amenazas, ni a los chantajes que se proponen". Ése es el mensaje que han lanzado este miércoles los concejales del PIL en Arrecife y San Bartolomé, que han enviado un comunicado conjunto en el que cargan contra el presidente de su partido y dejan claro que no abandonarán los grupos de gobierno de estos dos municipios, pese a la decisión adoptada por la dirección del partido de romper el pacto con el PSOE.
Los tres ediles cuestionan los motivos que llevaron a adoptar esa decisión y acusan al presidente, Ramón Bermúdez, de estar actuando como un "satélite" de Coalición Canaria, subrayando que cobra un sueldo como liberado a través de la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias, en manos de CC. "La liberación del presidente de un partido, por otro partido diferente, hace que el primero se convierta en satélite del segundo", denuncian.
Además, a esto suman el caso del vicepresidente segundo del PIL, José Marcial González, cuya destitución como asesor en el Ayuntamiento de Arrecife desencadenó esta crisis. "No readmitiremos al vicepresidente como asesor. Y no dejaremos nuestras responsabilidades de Gobierno mientras las administraciones, y nuestros socios de gobierno en ellas, lo necesiten", advierten los ediles, que consideran que su partido ha dado una "imagen vergonzosa" con este tema, al trasladar a la ciudadanía que el problema es "el interés en buscar un echadero pagado al vicepresidente".
"No atenderemos más a llamadas o instrucciones del presidente"
"Sabemos que nos pueden expedientar, expulsar y hasta tratarnos de tránsfugas. Nos afecta, y mucho, esta situación con nuestro partido que no merecemos. Pero desde este momento, con pesar, no atenderemos más a llamadas o instrucciones del presidente o vicepresidentes, hasta que éstos demuestren que sus decisiones son imparciales y están alejadas de intereses particulares", adelantan en su comunicado, remitido unas horas antes que el PIL celebre una reunión convocada para este miércoles.
Al respecto, los tres concejales insisten en que solo retomarán el diálogo con su partido "si el presidente renuncia a su liberación en la enseñanza por CC y se vuelve a dedicar con independencia" al PIL. "Igualmente, si el vicepresidente renuncia públicamente a obligarnos a nombrarle asesor en el Ayuntamiento, a partir de ahí todo lo podemos hablar, discutir y tratar dentro de la lógica en un partido. Pero no permitiremos que nos usen para intereses particulares", advierten en su comunicado. "Dejamos a la ética y responsabilidad del resto de compañeros del partido sus respectivos posicionamientos", añaden, lanzando así un mensaje a los demás miembros del PIL.
Y es que los tres concejales de Arrecife y San Bartolomé culpan de la situación a Ramón Bermúdez, que consideran que está llevando al partido por unos derroteros muy distintos de los que prometió. "Denunciamos tener un presidente que lleva ocho meses cobardemente desaparecido, dictando a unos lo que deben decir y reuniéndose con otros a escondidas. Pero sin dar la cara en el partido, ni ante la ciudadanía. Dejando el partido en manos de vicepresidentes de poco calado político, y hasta novatos, que en algún caso parecen buscar más de lo mismo: Hacer de la política su echadero personal", denuncian.
"Vergonzosa imagen"
En cuanto al supuesto motivo que llevó a la dirección del partido a decidir romper el pacto con el PSOE en ambos municipios, los ediles del PIL consideran que es "sorprendente e incomprensible", ya que ellos mismos pidieron a la alcaldesa de Arrecife la destitución de los asesores del partido en el Ayuntamiento.
"Lo que era una simple sustitución de un asesor en Arrecife, buscando otras personas con mayor preparación técnica, que puedan ayudarnos mejor con las nuevas áreas que asumimos, se ha convertido, sin más motivos, en encontrarnos de repente con que se nos amenazó en nota pública, sin escucharnos previamente, con la expulsión", cuestionan, recordando que el pacto firmado al inicio de la legislatura daba "libertad a los cargos electos en cada administración" para el nombramiento de asesores.
Por eso, consideran que el PIL ha dado la "vergonzosa imagen de aparentar" que la ruptura del pacto "es por el interés en buscar un echadero pagado al vicepresidente, al cual se deja a los pies de los caballos para siempre". "Recién llegado a la política y demostrando que solo busca un sueldo. Sucia jugada del presidente, que tapa su propio interés personal con la ingenua torpeza del vicepresidente", critican los ediles, que consideran que esto pudo ser solo una "disculpa" para conseguir "lo que quizá se buscaba" por parte de Ramón Bermúdez, "romper el pacto con el PSOE".
De hecho, al respecto subrayan que la decisión ni siquiera se adoptó solo para Arrecife, sino también para San Bartolomé. "Lo sentimos por nuestra compañera allí, que sin motivación alguna se ha visto metida en esta locura. Si lo que se quería era romper con el PSOE, motivos había otros de más importancia que podríamos hasta compartir sin necesidad de expulsarnos", plantean en su comunicado.
"Creíamos de verdad que el nuevo PIL quería ser un partido de estabilidad y sensatez. Una alternativa sería a PSOE y CC. Pero a la primera de cambio se traslada sin saber muy bien porqué a la ciudadanía y a nuestros votantes un lío incomprensible y vergonzante. Una imagen alejada de lo que pregonaba el presidente hasta ese momento", concluyen.
