La Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas juzgará el próximo martes a un hombre acusado de apropiarse de 91.000 euros de un cliente, a través de la agencia inmobiliaria de la que era administrador único. La Fiscalía pide para él 5 años y 9 meses de cárcel, una multa de 7.200 euros y la devolución del dinero a la víctima.
Los hechos ocurrieron hace dos décadas, en el año 2002, cuando esta inmobiliaria construía varias viviendas en Arrecife. En septiembre de ese año, el acusado firmó dos contratos de opción de compra con una entidad, sobre dos viviendas valoradas en 129.000 y 370.000 euros, ambas con plaza de garaje. Para ello, la víctima entregó un adelanto de 91.000 euros, estableciéndose un plazo máximo de entrega de los inmuebles que vencía en 2005.
Sin embargo, cumplido ese plazo, el escrito de acusación señala que la entidad “no obtuvo las viviendas que le correspondían, ni la devolución de tal importe, recibiendo constantes evasivas y excusas del acusado”.
“Con un evidente ánimo de enriquecerse a costa del patrimonio ajeno, no aplicó los pagos al destino previsto, haciendo suya la citada suma”, añade la Fiscalía.
Así, pide que sea condenado por un delito de apropiación indebida y que indemnice a la víctima tanto con la cantidad que entregó y que nunca pudo recuperar, como “en aquellas otras que acredite como perjuicio económico derivado de los hechos”.
