La escultura de Mararía, obra de la artista lanzaroteña Cintia Machín y uno de los símbolos culturales de Femés, ha amanecido este martes completamente pintada con un aerosol gris metalizado. El acto vandálico, que sorprendió a los vecinos a primera hora del domingo, ha generado una fuerte indignación en la localidad.
La pieza, creada por encargo municipal para rendir homenaje al personaje literario inmortalizado por Rafael Arozarena y a su vínculo con el pueblo, se encuentra a los pies del mirador de Femés, uno de los enclaves más visitados del municipio. La intervención vandálica ha cubierto toda la superficie de la escultura, afectando a su acabado original.
Además del ataque contra la obra de Machín, varios muros de la localidad han aparecido con grafitis, lo que refuerza la hipótesis de que los hechos se produjeron durante la misma noche.
El Ayuntamiento ha informado de que desde primera hora de la mañana de este martes 9 de diciembre los equipos municipales están trabajando para eliminar las pintadas y reparar los daños, tanto en la escultura como en los muros afectados. La institución ha expresado su “enérgica condena” a lo ocurrido y ha recordado que se trata de bienes públicos y patrimoniales que forman parte del paisaje cultural de Femés.
