La Guardia Civil de Yaiza investiga varias denuncias interpuestas contra una agencia de viajes del municipio por presuntamente estafar a decenas de clientes. Así lo ha podido confirmar La Voz. Entre ellas, está la de Adela (nombre ficticio), quien ha puesto en conocimiento de la Comandancia de la Guardia Civil de Playa Blanca la presunta estafa que sufrió por parte de la agencia de viajes Sol Playa Travel en la localidad turística. Desde entonces, Adela ha reunido a 57 personas presuntamente estafadas por la misma agencia en Lanzarote.
En su caso, expone que ingresó primero 1.000 euros y luego otros 1.478 euros para sacar unos billetes entre Austria y Colombia para tres personas de cara a sus vacaciones de verano. Luego, le pagó 230 euros a la misma agencia para que sacara un billete entre Tenerife y Lanzarote para su hijo, que no tiene el descuento de residente, para Semana Santa. Su sorpresa llegó cuando, a pesar de haberlo pagado, la agencia nunca le facilitó los billetes.
Esta vecina de Arrecife, que trabaja en un hotel en Playa Blanca, trató varias veces de contactar con la persona de la agencia al que le había transferido el dinero. Sin embargo, asegura que tras llegar varias veces a la oficina, se dio cuenta de que había retirado los sillones que tenía en el local.
Esta redacción ha tratado de contactar en dos ocasiones con la agencia, pero no ha obtenido respuesta. Además, sus cuentas de redes sociales han desaparecido y tampoco responde a los clientes sobre los impagos en la compra de vuelos.
A la denuncia de Adela, se suman otras que se han presentado también ante la oficia de la Benemérita en Playa Blanca. En otro caso, una clienta denuncia que pagó 1.067 euros al dueño de la agencia Sol Playa Travel para reservar dos vuelos al distrito colombiano de Cali para viajar en mayo de 2025. Según declaró a la Guardia Civil, recibió la prereserva de los billetes, pero las compañías aéreas le comunicaron que "se anuló por no haber sido abonado el pago".
Según esta segunda denuncia, el modus operandi del acusado sería informar a sus conocidos, la mayoría latinos, de ofertas para viajar al extranjero que "estarían muy por debajo del precio ofertado por otra agencias" y presuntamente les incita a "comprar los billetes con celeridad".
Finalmente, asegura en sede policial que luego entrega un sobre cerrado con los supuestos billetes, pero que en realidad solo es una "prereserva". Cuando las personas afectadas se dan cuenta, le reclaman los billetes, pero este "les da largas".
