El PP de Canarias se ha sumado este martes a la petición de un congreso extraordinario que dirima el futuro del partido, apostando así por poner fin al mandato de Pablo Casado.
En las redes sociales, el PP canario ha publicado un mensaje en el que indica que "las siglas y nuestros afiliados están por delante de cualquier cargo".
"Esperábamos una solución rápida por parte de la dirección nacional, pero ya ha llegado el momento de que las bases nos indiquen el camino. Por eso, solicitamos la celebración de un congreso extraordinario", añaden.
Esta exigencia se produce un día después de que el presidente del PP de Canarias, Manuel Domínguez, elegido en un congreso celebrado el pasado enero, dijera que no pone "la mano en el fuego por nadie" en el enfrentamiento entre el líder nacional de la formación, Pablo Casado, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Domínguez pasó de apoyar el proyecto de Pablo Casado el jueves pasado a pedir "cesiones" a todas las partes dos días después, y ayer lunes apremió a los dos protagonistas a buscar "soluciones conjuntas" y propiciar "una unión cierta".
Preguntado por si adelantar el congreso podría ser la solución, remitió al comité de dirección celebrado este lunes, y sobre la continuidad de Teodoro García Egea como secretario general deslizó que "las personas a veces no son la única causa" de un problema y que no hay que "centrarse en que alguien dimita".