"Ni participo, ni he participado nunca, ni tengo ningún propósito de participar en una trama para la construcción de la Urbanización Costa Roja en Playa Blanca, pudiendo afirmar con absoluta rotundidad que desconozco su existencia y que, en todo caso, si tal trama tiene o ha tenido existencia, soy por completo ajeno a ella". Así se ha pronunciado el empresario Juan Francisco Rosa, cuatro semanas después de que se hiciera pública la parte del sumario de la Operación "Unión en el que la UCO le [señala como el "gran beneficiario" de la trama de Costa Roja->34516] y del intento de soborno que llevó a cabo Fernando Becerra en nombre de Luis Lleó.
Además, y pese a que figura como imputado al menos en dos autos judiciales del sumario, Rosa señala que no tiene "conocimiento de que haya sido imputado por nada que tenga la más mínima relación con la Operación Unión".
El atestado de la UCO
Según el sumario de la causa, Juan Francisco Rosa estaba en trámites con Luis Lleó para comprarle los terrenos de Costa Roja. Además, el intento de soborno que Fernando Becerra realizó a Carlos Espino, denunciante de la trama, incluía no sólo legalizar la parcela en cuestión, sino también una operación para regularizar los hoteles ilegales de Playa Blanca y, a su vez, permitir la construcción de un campo de golf en Costa Roja.
Para los agentes de la UCO, está claro: "De esta nueva propuesta planteada para la utilización de los terrenos de Costa Roja con el fin de poder legalizar todos los hoteles ilegales de Playa Blanca, se puede decir que Luis Lleó no obtiene ningún beneficio directo, salvo los que obtenga por la venta de los terrenos". Es decir, se le está pidiendo a Espino no ya sólo regularizar la situación de parcela de Costa Roja, que es la que realmente afecta a Lleó, sino también la de todos los hoteles ilegales de Playa Blanca.
Según uno de los atestados de la UCO, con esta propuesta Juan Francisco Rosa "conseguiría no sólo que no le derriben los dos hoteles de su propiedad, sino también conseguiría, primero, regularizar la situación de esos hoteles. Segundo, sería el propietario de los terrenos de Costa Roja para cederlos al Cabildo, y así utilizarlos como zonas de equipamientos y zonas verdes. Y tercero, por la cesión de estos terrenos al Cabildo, obtendría la compensación sin obstáculos para la construcción y explotación de un campo de golf en Playa Blanca".
