El Consejo de Gobierno de Canarias ha aceptado este jueves la delegación del Cabildo de Lanzarote de la competencia para la evaluación de impacto ambiental de proyectos que deba tramitar y autorizar la Corporación insular, así como de "todos los instrumentos de ordenación insular, territorial o de ordenación de los recursos naturales y de todos aquellos instrumentos y programas de dicha competencia cuyo procedimiento de evaluación ambiental venga establecido por la normativa de aplicación".
La Evaluación de Impacto de Proyectos (EIA) tiene por objeto evaluar los efectos que un proyecto tiene sobre el medio ambiente, mientras que la Evaluación Ambiental Estratégica (EAE) evalúa ambientalmente planes o programas, y ambos tienen trámites distintos.
Desde el Ejecutivo regional recuerdan que la Ley del Suelo de Canarias establece que la aprobación, modificación sustancial y adaptación de los instrumentos de ordenación territorial, ambiental y urbanística se someterán al procedimiento de evaluación ambiental de planes y programas, en los términos contemplados en la legislación básica estatal.
Después, un posterior decreto de medidas urgentes de 2020 dio nueva redacción a la Ley, habilitando la posibilidad de delegación directa de la competencia para la evaluación ambiental de instrumentos o proyectos en el órgano ambiental autonómico, "introduciendo un mecanismo más ágil y eficaz que el convenio: una delegación intersubjetiva directa, que solamente requiere acuerdo de delegación del ente local y un acuerdo de aceptación del Gobierno de Canarias".
La delegación aceptada recae sobre la Comisión Autonómica de Evaluación Ambiental, que es un órgano colegiado de la Consejería de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Ambiental. Por tanto, será dicha Comisión la que realizará las funciones delegadas.