El consejero, a su entrada al Cabildo, se ha mostrado abierto a todas las propuestas y alegaciones que vayan a presentar los representantes del sector turístico lanzaroteño. "El anteproyecto se encuentra en fase de alegaciones y para eso hemos venido, para dialogar con todos y lograr el máximo consenso", ha explicado Berriel.
Por su parte, la consejera de Turismo, Rita Martín, ha mostrado su esperanza de que esta ley beneficie a los usuarios y también de que ayude a "flexibilizar situaciones, pero siempre manteniendo los estándares turísticos".
Objetivos de la ley
Según el Gobierno de Canarias, esta nueva Ley definirá el marco cuantitativo y cualitativo de la carga turística del Archipiélago para los próximos tres años, "con el objetivo de facilitar los procesos de adaptación del planeamiento, liberalizando con criterios simplificadores aquellas actividades de menor trascendencia territorial, con especial incentivación al desarrollo rural, a la producción de energías limpias endógenas y al equilibrio sectorial, especialmente a través de lapromoción industrial".
Además, pretende conseguir la renovación y mejora de las infraestructuras y establecimientos turísticos obsoletos, mediante la acción concertada entre el sector y la administración. De esta forma, "si por ejemplo un hotel que esté obsoleto decide ceder ese suelo a uso público y edifica el hotel en otro terreno, siempre urbanizable, la ley contempla que se le cedan tres plazas por cada una que tire", ha explicado el consejero.
