Agentes de la Policía Nacional han detenido a un grupo de individuos de origen dominicano, afincados en la Comunidad de Madrid, dedicados al tráfico y distribución de sustancias estupefacientes y psicotrópicos. La red utilizaba "correos" humanos para la introducción de la droga adquirida en Sudamérica y para el traslado del dinero obtenido con la venta ilegal en nuestro país. En la operación policial han sido detenidos catorce individuos, diez en Madrid y cuatro en Arrecife (Lanzarote), y se han intervenido distintas cantidades de droga, psicotrópicos, 86.000 euros, una pistola 9mm y material electrónico.
Los arrestados formaban parte de un grupo organizado que se dedicaba a introducir cocaína en España procedente de países de Latinoamérica. Posteriormente, se encargaban de transformarla y distribuirla en distintos puntos de la geografía española y recaudar el dinero obtenido con su venta, que era enviado a América utilizando también "correos".
Los integrantes de la red conformaban un grupo estructurado en el que cada uno tenía una función definida. Unos se ocupaban de almacenarla en España y transformarla. Otros organizaban la distribución por todo el territorio español y, finalmente, se encontraban los que recogían y organizaban el envío del dinero obtenido.
CORREOS
El método utilizado para introducir la cocaína en España era a través de "correos" que, bajo la apariencia de turistas, viajaban a distintos países de América Latina y regresaban cargados de cocaína. Uno de estos correos fue detectado y detenido a primeros de mes en el aeropuerto de Madrid Barajas. Se le intervino 1.500 gramos de cocaína que ocultaba entre sus ropas, en un doble fondo de los calzones que vestía.
Las gestiones posteriores dieron como resultado la localización de las viviendas que eran utilizadas para el depósito y adulteración de la cocaína introducida en España y el almacenamiento del dinero que era enviado al extranjero. En ellas realizaban el "corte" y elaboraban pequeños cilindros, que pudieran ser ingeridos por los portadores.
Los "correos", empleados para el transporte de las sustancias estupefacientes en España eran "embarazados". Ingerían los cilindros elaborados en la vivienda de Parla (Madrid) y desde la misma partían hacía el aeropuerto de Barajas con el fin de desplazarse hasta su destino.
NEGOCIO EN CANARIAS
Los responsables del grupo se plantearon la posibilidad de ampliar sus actividades delictivas a las Islas Canarias. Para ello contactaron con un hombre y una mujer que habrían de realizar un viaje desde Arrecife a Madrid y regresar al día siguiente con una cantidad de droga.
Los investigadores de la Brigada Central de Estupefacientes, en colaboración con la Comisaría de Lanzarote, identificaron a dos de estos correos que fueron detenidos en el aeropuerto de dicha ciudad con 750 gramos de cocaína. Una parte de esta cantidad era transportada por un varón en el interior de su organismo y, la otra, por una mujer que ocultaba unos cilindros en la vagina y otros adosados al cuerpo.
En la isla de Lanzarote fueron arrestados, además, una pareja que se había desplazado a la isla con la finalidad de recepcionar el envío de cocaína y organizar su distribución.
ACN Press