El caos absoluto se apoderó del aeropuerto lanzaroteño de Guacimeta el jueves de la semana pasada. Y al parecer, como advirtió el presidente del Comité de empresa de Iberia, León Fajardo, para hoy se espera un despropósito similar o incluso mayor, ya que se prevé la llegada de varios vuelos regulares de diversos puntos de la península, además de vuelos chárter procedente de Europa.
Retrasos, como tónica general
El jueves resultó ser un día histórico para la huelga que desde la semana pasada se inició por los sindicatos presentes en el aeropuerto. Los retrasos fueron la tónica general de la jornada, pero el caso de tres vuelos de Irlanda y Gran Bretaña fue especialmente sangrante.
Los pasajeros del vuelo de Air Jet, que aterrizaron en Guacimeta procedentes de Dublin no daban crédito a sus ojos ante el proceder de la compañía a raíz de la huelga del handling lanzaroteño.
Haciendo honor al sentido práctico de los anglosajones, el avión decidió despegar hacia Irlanda sin descargar las maletas de los turistas que había traído y sin cargar los bultos de los pasajeros que volvían a su país de origen. Así, los turistas llegados a Lanzarote se quedaron varias horas en el aeródromo con la incredulidad de haberse quedado sin sus cosas.
Más de 300 maletas
Sus maletas no volvieron a la Isla hasta el domingo, el mismo día que los bultos retenidos en Guacimeta pudieron despegar hacia Dublin. Más de 300 maletas se llevó el vuelo de Air Jet dejando sin ropa a todos los pasajeros que llegaron hasta Lanzarote para pasar sus vacaciones, el mismo número de bultos que dejó en tierra.
El mismo proceder fue adoptado por la compañía Britannia, sólo que ésta dejó en la Isla unas 40 maletas al tratarse de un vuelo poco cargado.
La compañía británica Astraeus sufrió también las consecuencias de la protesta de los trabajadores de tierra del aeropuerto. Llegó sobre las 13.30 horas y su despegue estaba previsto en una hora. Sin embargo, el vuelo tuvo que quedarse hasta las 17.30 horas, sufriendo así cerca de cuatro horas de retraso.
Por su parte, la compañía Binter sufrió retrasos de más de una hora en dos de sus vuelos, el 530 y el 536. El resto de los vuelos tampoco se salvaron del caos, y la media de los retrasos se situó en al menos media hora.
Hoy la situación será similar. El Comité de empresa prevé un verdadero caos en Guasimeta, que podría desbordar los peores augurios, superando los problemas a lo ocurrido el pasado jueves.
Negociaciones con Iberia
León Fajardo recalcó que no se ha producido ningún movimiento por parte de Iberia para dar una solución al conflicto. De hecho, todo parece indicar que la compañía pone soluciones a la crisis sin tener en cuenta para nada las demandas de los trabajadores. Y en este sentido van las contrataciones de empleados provenientes de Gran Canaria para suplir el trabajo de los huelguistas.
Esta actitud fue calificada por Fajardo como ilegal. El Comité de empresa asegura que la compañía ya lleva contratados a un total de doce trabajadores, un hecho, que sin lugar a dudas, dificultará el que se pueda producir una pronta solución al conflicto, que vaticinan, se prolongará por varios meses.
Posturas "muy distantes"
En estos momentos, y tal y como reconoció Leo Fajardo, representante de los trabajadores en el comité de huelga, las posturas entre la compañía aérea y los propios empleados se encuentran "muy distantes", por lo que ve difícil que se pueda alcanzar una pronta solución al conflicto. "Ya en la anterior ocasión en que nos pusimos en huelga, hace ahora tres años, el conflicto se prolongó por espacio de nueve meses, y en esta ocasión también soy bastante pesimista al respecto", concluyó Fajardo.
