Un vecino de la calle Cervantes, en San Bartolomé, ha escrito a La Voz para quejarse de los vehículos que aparcan "todos los días" en esta vía de doble sentido, pese a que tiene una raya amarilla. "Bloquean la salida y entrada de los vecinos y la Policía Local no pasa nunca por ahí", asegura.
En este sentido, explica que esta calle de doble sentido tiene "partes de línea discontinua en cada porche de los vecinos para que puedan salir de casa". "No se puede estacionar el vehículo y menos invadir la calle y eso es lo que hacen", denuncia.
Esta situación suele repetirse "todos los días por la mañana" cuando padres van a dejar a los niños al colegio y dejan "ahí aparcados sus coches" y también al mediodía. "Hay un parking para cerca de 50 coches muy cerca", afirma este vecino.
"Pago 400 euros de impuestos al año y, por lo menos debería salir de mi casa sin problemas", critica.