Una vecina de Costa Teguise ha hablado con La Voz para alertar sobre la presunta estafa que están llevando a cabo dos personas en la que alquilan viviendas que no son suyas para que otras personas las okupen a cambio de un dinero.
Todo comienza cuando el hermano de esta vecina alquiló hace dos años su casa a una pareja que finalmente terminó por dejar de pagar el alquiler en abril de 2024. Tras ello, este año consiguieron que ambos abandonaran la vivienda.
La mujer, que vive al lado de la vivienda de su hermano, comenzó a darse cuenta de movimientos extraños que le llevó a descubrir que esta pareja estaba siendo ayudada por dos hombres. "Nos dimos cuenta de que cuando se estaba acercando la fecha del desahucio estos chicos comenzaron a aparecer más en casa de mi hermano y vimos movimientos raros", cuenta.
Aquí es donde se dieron cuenta que estos dos varones presuntamente son quienes gestionan una especia de 'inmobiliaria de okupas', es decir, que son ellos quienes se encargan de ver qué casas son las que se pueden okupar, lo llevan a cabo y las alquilan a cambio de dinero a otras personas. En este sentido, la vecina explica que "a los inquilinos que estaban okupando la casa de mi hermano les buscaron una casa a cien metros de la mía para meterse también".
Por lo tanto, los responsables de esta estafa realizan dos movimientos. Por un lado, meten a unos okupas y sacan a otros, y en la casa de su hermano destinaban a otros para mantener la casa okupada. Es decir, algunas personas pagaban por entrar en la vivienda pero, si la policía conseguía echarlos de la vivienda, a estos no se les devolvía ese dinero. "Por lo visto la policía sabe quiénes son estas personas", refieriéndose a que los agentes probablemente hayan recibido más denuncias sobre estos individuos.
Tras estos hechos, su hermano llamó a la Guardia Civil para intentar sacar a ambos de su vivienda. "Con la orden de desahucio, los agentes los echaron", dice.
Además, explica que tras recuperar su casa, su hermano "tuvo que contratar seguridad privada para que vigilara la casa y que no volvieran a okupar la casa porque estos dos chicos estuvieron volviendo todas las noches siguientes para ver si podían meterse de nuevo y, a partir de la tercera noche, lo que hacían era venir a ver si seguía la seguridad o no".
Ahora, estos 'inquiokupas' se encuentran en otra vivienda cercana que se encontraba vacía, ya que, según señala esta vecina, "pertenece a unas mujeres alemanas cuyos padres fallecieron y heredaron esta casa". Asimismo, consiguieron ponerse en contacto con ellas para comentarles la okupación del domicilio, por lo que una de ellas se trasladó a Lanzarote y se encuentra en trámites para poder ser expulsarlos de la casa.
"Es una incertidumbre y una impotencia estar en esta situación, en los últimos seis meses, la policía ha venido en 15 ocasiones", asegura.
Desperfectos en la vivienda
Después de recuperar la casa, se encontraron con diversos destrozos que provocaron los 'inquiokupas'. "La campana extractora de la cocina está totalmente quemada y derretida, y todas las paredes de la casa tienen boquetes", indica.
Además, también se encontraron con los marcos de las puertas rotos, macarrones pegados en el techo y las paredes sucias "como si hubiese habido una batalla campal".
