Recuerdo hace escasas semanas la rueda de prensa en el Cabildo, cuando los cuatro partidos firmantes de la censura al PSOE y del posterior pacto de Gobierno, CC, PIL, PNL y PP, aseguraban que aquel acuerdo anticipaba un futuro de unidad ...
Recuerdo hace escasas semanas la rueda de prensa en el Cabildo, cuando los cuatro partidos firmantes de la censura al PSOE y del posterior pacto de Gobierno, CC, PIL, PNL y PP, aseguraban que aquel acuerdo anticipaba un futuro de unidad nacionalista para Lanzarote, con el respaldo fiel de los conservadores.
Podía tener sentido. Las cifras cuadraban en todas las instituciones y el entendimiento de Coalición y Partido Popular en el Ejecutivo regional corroboraba la coincidencia ideológica de ambas fuerzas a la derecha del espectro político canario.
Sin embargo, trascurrido un mes de la censura en el Cabildo, nada ha sucedido en el resto de las administraciones. O, bien mirado, ha pasado de todo. Hagamos un breve repaso por las Corporaciones locales en disputa:
Arrecife: Tras seis meses de gobierno en minoría, el PSOE aprueba los Presupuestos con el apoyo de Coalición Canaria y Alternativa Ciudadana. Aquí los nacionalistas rechazan el pacto suscrito en el Cabildo pero incluso sin ellos, las fuerzas restantes suman una mayoría que no se pone de acuerdo.
Teguise: En La Villa, una de las fuerzas nacionalistas a favor de la unificación, CC, censura a la otra, el PIL, desplaza al alcalde de los Independientes y coloca al suyo propio. Posteriormente y con toda lógica y derecho al pataleo, el Comité Local del PIL acuerda que con Coalición, ni a la vuelta de la esquina.
Tías: Tres concejales, tres, de la ganadería de Coalición han podido levantar la mano para sumar con el PP y el PIL la mayoría necesaria para desalojar al alcalde socialista. Pero nada. La tercera es la vencida, dice con tono de duda el presidente de CC.
Yaiza: Coalición Canaria dice estar luchando por entrar en el gobierno sureño, actualmente en manos del PIL; otra vez los amigos nacionalistas. Pero debe contar con el tercero en supuesta concordia, PNL, que donará graciosamente su mano alzada siempre que reciba la alcaldía de Arrecife. Y aquí entra en juego la fuerza conservadora que respalda la unión del Nacionalismo, el PP, cuyo portavoz también quiere mandar en la capital.
¡Claro! Por eso el PNL, que ni pincha ni corta en Tías, exige celeridad a Coalición Canaria en ese municipio, para firmar la censura contra el PSOE, darle la alcaldía al PP y recibir ellos la de Arrecife.
Pero que quede claro, todo el tejemaneje de intercambio de apoyos y el mercadeo de ofertas y contraofertas de pactos es en beneficio de la estabilidad de las instituciones y de la dignidad de la política isleña.
Así las cosas, Claudina Morales plantea que no se debe perder el tiempo en discutir sobre si el pacto en el Cabildo fue una buena o una mala decisión o si fue o no compartida y aceptada por todos. Y efectivamente, a la vista de la independencia de criterio de los nacionalistas en los municipios y de las primeras y evidentes disfunciones en el seno del Cuatripartito, la discusión sería vana.
No puedo despedir la crónica del disparate nacionalista con respaldo del PP sin recordar para la historia la última frase genial del presidente de CC en Lanzarote, en declaraciones sobre su partido: "Aquí no hay una dictadura, simplemente hay opiniones de ciertas personas que sobran".
PDT: Para colmo de la unidad nacionalista con apoyo popular, leo en la prensa que José Manuel Soria presentó los Presupuestos regionales en Lanzarote a los muros centenarios del Castillo de San José. Ni el presidente del Cabildo, ni su consejero de Hacienda, ni los alcaldes de la isla, ni los presidentes de las patronales turísticas, ni la directiva de la Cámara de Comercio acudieron al acto. Los conservadores y su líder regional fueron objeto del mayor de los desprecios, tanto político como institucional por parte de sus socios de Gobierno y empresarios afines. Sana camaradería, vive dios.