Reflexión humeante

Por David Alfonso Después de ver que la desaceleración anunciada por el gobierno anterior se convertiría a bombo y platillo en una más que humeante recesión económica real, reconocer que el seis y pico por ciento del PIB se rectificaría en un ...

30 de marzo de 2012 (10:37 CET)
Por David Alfonso
Después de ver que la desaceleración anunciada por el gobierno anterior se convertiría a bombo y platillo en una más que humeante recesión económica real, reconocer que el seis y pico por ciento del PIB se rectificaría en un ...

Después de ver que la desaceleración anunciada por el gobierno anterior se convertiría a bombo y platillo en una más que humeante recesión económica real, reconocer que el seis y pico por ciento del PIB se rectificaría en un bofetón del 8 y pico por ciento o castigar al hígado del presidente por las acciones realizadas de un inoperante gobierno a la relegación de su partido a la oposición más absoluta de la historia, ésta, propiciada por la gran mayoría de los ciudadanos de este país, creíamos a toda fe que los problemas tomarían otro cauce salvador. Pero, nada más lejos de la realidad.

Se han tomado decisiones muy duras en cuanto a la Reforma Laboral se refiere. Afectará a muchas persona sean trabajadores modélicos o no, pero estas reformas según el actual gobierno, permitiría en un plazo medio, sanear las listas de paro. Lo curioso en estas apreciaciones es que no se ha matizado a quiénes va a beneficiar o quién se va a beneficiar del despido libre.

El ministro canario de industria y Turismo ha extendido carta blanca a una multinacional petrolera con muchos problemas para iniciar extracciones de crudo frente a costas canarias sin tener en cuenta que estas islas viven única y exclusivamente del turismo. El pasado día, el ministro hacía alusión a comentarios vertidos como consecuencia de esta acción, indicando que se adoptaron estas medidas por el bien general. Dijo que se crearían puestos de trabajo y que no entendía la insistencia a vivir del subsidio.

Yo le pregunto desde aquí a usted, ¿dígale al pueblo lanzaroteño con total transparencia en qué se basa ese bien general del que tanto alardea? Si en primer lugar se destruiría un hábitat de incalculables proporciones como es, por ejemplo, el paso más importante de cetáceos del mundo que lo tenemos delante de nuestras narices.

Instruya a los ciudadanos lanzaroteños acerca de los puestos de trabajo del que usted tanto saca pecho si lo que se necesita será personal cualificado con idiomas. En Lanzarote hay un 20 por ciento de parados que no encuentran trabajo pero tampoco están formados para este empleo. Desde aquí le aseguro que las plantillas se traerán de fuera (información contrastada con operarios de plantas petrolíferas).

¿En qué basa usted esa mejoría para el pueblo lanzaroteño? Para concluir le diré que sus pretensiones de mutilar la economía motor de unas islas que viven del turismo son cuanto menos descabelladas. Islas que son Reserva de la Biosfera, que poseen aguas cristalinas y maravillosas playas. No necesitan las especulaciones de un gobierno que busca a toda costa, rebajar el PIB, acosado por el poder europeo.

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