“La Graciosa, la isla de los 428 turistas por habitante. Ningún lugar tiene tanta presión turística como la octava isla canaria, vieja utopía perdida.” Este es el titular que el periódico el Mundo le dedicaba este verano a la isla de La Graciosa… Es curioso que, si lo anuncia el PSOE -ya lo hicimos en el mandato pasado- nos tildan de ecologistas radicales, creadores de pobreza y mantenedores de subvencionados. Ahora bien, si lo dice otro, los liberales y los defensores del cuanto más mejor empiezan a preocuparse.
No hace falta que un periódico venga a contarnos la realidad de la Graciosa, solo hay que quitarse la venda de los ojos y mirar. Pero para eso hay que querer ver. Ver que en Órzola, puerta de entrada al espacio natural protegido del Archipiélago Chinijo, las hileras de coches ocupan terrenos y solares; ver cómo en La Graciosa las escombreras y residuos proliferan; ver cómo los servicios sanitarios de la isla no dan abasto, ver cómo el número de vehículos no ha parado de aumentar. Si a esta mirada le añadimos los datos que ya conocemos, 300.000 visitantes al año en una isla de 700 habitantes, nos damos cuenta de que el territorio graciosero se nos ha ido de las manos.
Para el PSOE es indispensable proteger y preservar la riqueza ambiental, social y económica de La Graciosa. Por eso hemos propuesto establecer una capacidad de carga y una tasa de corresponsabilidad dirigida al cuidado de los recursos naturales del Archipiélago Chinijo: su crecimiento insostenible y la ausencia de límites está primando la cantidad sobre la calidad, malbarata sus valores y rebaja el bienestar de su población.
No es una ocurrencia del PSOE, otros destinos turísticos del planeta han adoptado medidas como las aquí propuestas. las Islas Cíes han establecido un número máximo de visitantes al día, Barcelona ha adoptado medidas para limitar el número de visitantes y Venecia ha aprobado recientemente una tasa turística.
Por eso solicitamos que se trabaje en el Plan Rector de Uso y Gestión, que se redacten los informes previos necesarios para que todas las partes implicadas opinen, aporten y participen. De esta manera podremos conservar y proteger los recursos naturales, el desarrollo económico y la calidad de vida en La Graciosa.
Ariagona González Pérez. Portavoz del Grupo Socialista en el Cabildo de Lanzarote
