España, pese a todo, un país de oportunidades

Por Francisco Cabrera La historia de nuestro país está llena de momentos de dificultad y de cómo los españoles hemos sido capaces de superarlos. Somos un pueblo laborioso que ha sabido sobreponerse a los distintos avatares que nos ha deparado el ...

20 de noviembre de 2012 (21:32 CET)
Por Francisco Cabrera
La historia de nuestro país está llena de momentos de dificultad y de cómo los españoles hemos sido capaces de superarlos. Somos un pueblo laborioso que ha sabido sobreponerse a los distintos avatares que nos ha deparado el ...

La historia de nuestro país está llena de momentos de dificultad y de cómo los españoles hemos sido capaces de superarlos. Somos un pueblo laborioso que ha sabido sobreponerse a los distintos avatares que nos ha deparado el destino. Y los hemos superado porque, como diría el profesor Fuentes Quintana, todo país debe contar desde el punto de vista económico con Recursos Naturales, Recursos Humanos, Educación-Formación, Innovación y Control. ¿Y por qué Control?. Porque si faltase, todo lo demás decae o se debilita.

Ha sido el descontrol de los últimos gobiernos socialistas, su falta de iniciativas, lo que nos ha llevado a una de las crisis más severas que ha vivido nuestro país en los últimos 70 años. Pese a ello, en plena crisis, con la deuda, la prima de riesgo, la crisis bancaria, un 25% de desempleo, etc...; España es un país lleno de oportunidades.

Nuestro sector turístico está en su récord histórico. Los ingresos por Turismo en 2011 crecieron un 14% y en 2012 , la cifra sigue creciendo. Somos el segundo país del mundo en ingresos, tras Estados Unidos. El año pasado nos visitaron 57 millones de turistas. Nosotros somos 46 millones.

Nuestras exportaciones de bienes y servicios han crecido un 18% en los últimos años, contribuyendo, considerablemente, a reducir el déficit de nuestra balanza comercial y redoblándose los esfuerzos de internacionalización de nuestras empresas.

Son empresas españolas las que lideran la ampliación del Canal de Panamá; un consorcio de compañías españolas construirán del primer tren de alta velocidad en Oriente Medio, entre la Meca y Medina; son empresas españolas las que gestionan los aeropuertos de Londres, Orlando y Bogotá; son españolas las empresas que construirán el nuevo parque eólico alejado de la costa, en Escocia; las que suministran aerogeneradores a las principales economías del mundo; las que construyen plantas desalinizadoras en Adelaida o en el desierto de Atacama; las que han creado el sistema de reservas de vuelo que usan cuantos nos visitan; es española la empresa a la que Alemania le ha encargado el control de su espacio aéreo, ahorrando tiempo y combustible; las que están desarrollando una vacuna contra el Alzheimer o las que han construido la estación meteorológica del Curiosity Mars Rover, y es española también la compañía de telecomunicaciones que da servicios a más de 300 millones de clientes, en 25 países.

Además estamos a la cabeza en sectores como las tecnologías limpias. Un 13% de nuestro consumo energético es renovable y somos el número uno en energía solar instalada y cuarto en eólica. También contamos con algunos de los gigantes de la moda global y una multitud de empresas en el sector dispuestas a vestir y calzar a todo el planeta.

Estamos en un país que, pese a las actuales circunstancias, está incubando un creciente número de empresas nuevas y dinámicas, dispuestas a dar el salto y entrar en el ranking mundial. Se está potenciando el espíritu emprendedor, el esfuerzo y la creatividad de los hombres y mujeres de nuestro país, al tiempo que existe una alta consideración sobre el nivel de preparación de nuestros profesionales, reclamados por las principales economías de nuestro entorno. Fortalezas éstas, que han sido reconocidas y destacadas por Gran Thronton, una de las mayores organizaciones de servicios profesionales de auditoría y asesoramiento fiscal y financiero, enfocada a potenciar el desarrollo de las empresas y favorecer su incursión en el mercado internacional.

Se dice que España es un país fantástico para vivir. Quizás sea por nuestro sol, por nuestra gastronomía, por nuestra diversidad o por nuestro sistema social o sanitario. Somos un pueblo alegre y trabajador, y trabajamos tanto, como sabemos disfrutar de la vida.

Es posible que esta crisis nos esté sirviendo para plantearnos como hacer mejor las cosas, en un país lleno de oportunidades.

*Francisco Cabrera García, diputado nacional del PP

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