Es saludable criticar y exigir

Es cierto que la derecha española ataca fuerte, y entonces parecería que los que somos de izquierdas tenemos que hacer piña, pero hace falta que estemos atentos a no apartarnos de nuestras convicciones personales, dejándonos influir ...

5 de julio de 2005 (14:50 CET)

Es cierto que la derecha española ataca fuerte, y entonces parecería que los que somos de izquierdas tenemos que hacer piña, pero hace falta que estemos atentos a no apartarnos de nuestras convicciones personales, dejándonos influir excesivamente por las salidas de tono de un PP desorientado. Y es que, mientras desde el gobierno se están tomando medidas justisimas pero «baratas» económicamente hablando como la posibilidad del matrimonio entre personas homosexuales, o la facilitación del divorcio, o la persecución de la violencia de género, al mismo tiempo podemos ver que a nivel económico y laboral este gobierno está siguiendo todas las demandas de las patronales y aplicando una política neoliberal como no se podía esperar de otra manera vista la trayectoria europea del señor Solbes. Estamos escuchando anuncios por parte del gobierno en la línea de abaratar el despido, de no aumentar el pírrico sueldo mínimo interprofesional, y de aplicar un tramo único en la tributación fiscal, cosa que beneficiaría sobre todo a las rentas altas. Necesitamos un gobierno valiente a nivel económico y, para conseguir esto, necesitamos unos medios de comunicación progresistas valientes que no queden secuestrados a adular el PSOE ante el embate del PP, y por encima de todo, necesitamos una sociedad crítica que no dimita de la sana exigencia al gobierno, que es él en definitiva y no la oposición el responsable de las políticas públicas.

 

Jordi Oriola Folch

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