Jueves 13 de abril, víspera del día de la República, mientras tomaba el último café del desayuno encendí la tv para intentar que mi tensión arterial fuera lo más terrenal posible. He de reconocer que si habitualmente tardo una media hora larga en aterrizar en este planeta esa mañana mi tensión subió tanto que me obligó a escribir estas letras.
Allí en mi zapping estaban los chicos de camisa azul, con su fondo de decorado neutro, podían estar en el País Vasco, con perdón, en Cataluña, también con perdón, en Valencia, en Andalucía. Pero no, estaban en Gran Canaria, y lo supe por que la cámara tomó una imágenes de canarios, me refiero a los miembros del pp que residen en Canarias.
El presidente del pp "español", comenzaba su meeting recordando, cuál turista, que él ya venía desde hace 20 años con sus padres, luego con su esposa y su hijo mayor y ahora con toda su familia. Por estas fecha, como es natural, llegan ellos, los turistas, a disfrutar de nuestro país, Canarias.
Desde su "púlpito" reclamaba que "hoy más que nunca" es necesario hablar y dirigir la acción política hacia las cosas que verdaderamente importan a las personas. En ese momento me incorporé en el sillón interesada por sus reflexiones y por sus propuestas. Aquel hombre con su camisa remangada hasta el codo se disponía, con un tono elevado, a compartir con la sala del auditórium y conmigo, en el salón de mi casa a través de la tv, sus propuestas para resolver los problemas básicos de todos nosotros. Cuál no fue mi sorpresa, mis problemas eran:
No a Batasuna, no a la nueva Ley de Educación, no al Estatuto de Cataluña, que además según él y sólo él es anticonstitucional. Pero sí a Merkel, sí a Bush, sí a Blair, sí al Vaticano para solucionar el tema de la inmigración. Sí a España Unida, a esa España vieja formada hace más 500 años, a esa España grande y fuerte que siempre ha sido reconocida por los demás.
¿Batasuna?, ¿Rubalcaba?, ¿Estatuto Catalán?, ¿Vaticano?, ¿Castro? ¿Esos son los problemas que afectan al día a día de los canarios? ¿A este presidente alguien le comentó que estaba en Canarias? ¿Nadie tuvo la piedad de mencionarle, mientras se dirigía al Auditórium del INFECAR, un par de temas sobre Canarias?
Compañeros, 500 años después, el mismo "castellano" decide por nosotros qué es lo urgente y prioritario para los canarios pero sin mencionar nada sobre Canarias, sobre mi isla de Gran Canaria, sobre mi ciudad de las Palmas de Gran Canaria, sobre mi barrio de ¡Santa Catalina¡
A esa altura de la mañana y con el café frío entre mis manos, con mi tensión arterial, mi sangre y mi corazón a 1000 revoluciones por minuto, me reafirmo en mi fe y mi amor por esta patria chica, Canarias. Las mujeres y hombres que vivimos y sentimos a Canarias no necesitamos a predicadores turistas, con uniformes y olores alimonados que cada cierto tiempo nos recuerden quiénes somos y qué debe preocuparnos.
Los canarios, los gran canarios, somos un pueblo que disfruta de la mejor herencia que nos han dejado nuestros antepasados, me refiero a una historia, una memoria y una educación que nos hace independientes y libres de todos aquellos que intenten nuevamente "conquistarnos" y decidir por nosotros.
Alicia Gómez Martín
Portavoz de Coalición Canaria en el Ayuntamiento de las Palmas de Gran Canaria
Secretaria Nacional de Movimientos Sociales y Participación de Coalición Canaria .