Los mercados financieros brindan la posibilidad de generar grandes beneficios, pero es necesario comprender cómo funcionan. Si uno es principiante, una buena opción es el mercado de divisas, comúnmente conocido como Forex.
En el mundo del trading, existen una multitud de mercados e infinidad de activos financieros que cotizan diariamente a ritmos diferentes y en función de factores muy variados. Dichos activos pueden ser de largo o corto plazo, depender del rendimiento de empresas o de algún otro valor de referencia y ser valorados en función de la especulación financiera.
Si los términos son nuevos, lo mejor es tener a disposición un Glosario de bolsa que pueda despejar las definiciones y darnos una idea de qué tipo de bienes, activos o valores pueden encontrarse en el mercado, puesto que sus características particulares determinaran las dinámicas de su comercio. Uno de los más conocidos y más recomendados para los no iniciados es el mercado de activos monetarios o divisas Forex.
Se trata de un mercado mundial en el que los inversiores pueden intercambiar y comerciar con distintos tipos de divisas y, en consecuencia, obtener un beneficio. Este mercado es comúnmente conocido como Forex, y es uno de los mercados financieros líquidos más grandes del planeta. El valor de los activos se fija en función del horario del mercado del país de origen de la moneda en cuestión. Los principales mercados son las bolsas de Nueva York, Londres y Tokio.
Cómo funciona el mercado Forex
El mercado de divisas opera con base en las cotizaciones relativas de los distintos títulos monetarios del mundo. La cotización de los activos como el dólar, euro, etc. es similar a la cotización que se hace, por ejemplo, de las acciones de una empresa: la imagen y el rendimiento de ésta hará subir o bajar la demanda de sus acciones, lo que, respectivamente, hará subir o bajar su precio.
Dichas cotizaciones dependen exclusivamente de la especulación en función de ciertos parámetros como pueden ser el riesgo país, el crecimiento y las reservas del Tesoro, entre otros. Y si bien los inversionistas pueden considerar estos parámetros relativamente objetivos, lo cierto es que la expectativa, las fluctuaciones del mercado y esencialmente la especulación son las que finalmente determinan el valor de la moneda en un determinado momento.
En efecto, la situación política, económica o social de un país puede determinar de manera significativa el valor de los activos de este mercado. Cuanta menor estabilidad y peor rendimiento económico general, menos países tendrán incentivos para comerciar con el país o ahorrar en su moneda. Es por este motivo que se considera, en ciertos casos, un mercado que admite una estrategia de inversión tanto a corto como a mediano y largo plazo.
El mercado Forex es un mercado financiero en el que inversionistas, instituciones y bancos de todo el mundo intercambian divisas con distintos objetivos. Se trata del mercado líquido de mayor tamaño del planeta y supone un ámbito fructífero para muchas y muy variadas estrategias de inversión y crecimiento económico.