Aunque parezca que toda la vida ha sido así, la opción de que personas del mismo sexo puedan estar unidas de manera oficial ante la ley como matrimonio es algo relativamente reciente. De hecho, hoy en día son pocos los países con matrimonio igualitario en el planeta, y son muchas más las naciones que no cuentan con esta posibilidad, lo que supone una importante discriminación para personas homosexuales.
Solo las naciones más progresistas han dado pasos hacia la igualdad en ese sentido desde las últimas décadas. Y España es una de ellas. De hecho, el país fue uno de los primeros en legislar para que hombres y mujeres pudieran casarse con personas de su mismo sexo, convirtiéndose en uno de los modelos de tolerancia y respeto a las orientaciones diversas del mundo.
Resulta curioso que en un país tradicionalmente católico se aprobara este tipo de ley hace casi veinte años. Y es que fue en 2005, bajo el gobierno socialista de Rodríguez Zapatero, cuando se dio carta de naturaleza a este tipo de uniones civiles. Desde su aprobación, cambió la vida de cientos de gais y lesbianas que vieron cómo, después de años de silencio, podían oficializar sus relaciones y tener todo el amparo legal igual que el de las parejas heterosexuales.
Con esta ley, que contó con el apoyo mayoritario del 66 % de la población, España se convertía en el tercer país del globo en legitimar las uniones entre personas de un mismo sexo. Un hito fundamental, con todo lo que ello conlleva: posibilidad de herencia, pensiones por viudedad, permisos por enfermedad, procesos legales de adopción… Esta posición preponderante como país democrático convirtió la nación en un ejemplo para el resto de naciones, que poco a poco van asumiendo que esta es la senda que hay que transitar para llegar a una igualdad total para sus ciudadanos.
Países con matrimonio igualitario hoy
En la actualidad, son dieciocho los países europeos que cuentan con legislación que hace posible el matrimonio igualitario entre personas del mismo sexo: Austria, Bélgica, Dinamarca, España, Finlandia, Francia, Alemania, Islandia, Irlanda, Luxemburgo, Malta, Países Bajos, Noruega, Portugal, Reino Unido, Suecia, Eslovenia y Suiza. Pero no son los únicos que han legislado algún tipo de estado civil que certifique este tipo de uniones: Andorra, Croacia, Estonia, Grecia y San Marino, entre otros, cuentan con distintos tipos de procesos que certifican la unión civil entre varones o mujeres, aunque no se llame exactamente matrimonio ni se cuente exactamente con los mismos derechos.
De esta manera, son 31 de los 50 países de la UE los que ya reconocen como posible que las personas homosexuales puedan unirse con sus parejas. Y certifican que el estado les protegerá y les otorgará una serie de derechos vinculados a su decisión.
A nivel global, otras naciones como Canadá, Argentina, Islandia o Colombia han ido, desde principios del siglo XXI, uniéndose a esta realidad que no hace más que certificar que los países con matrimonio igualitario son más libres, justos y protectores con sus ciudadanos.