El sector pesquero lanzaroteño obtuvo en 2017 una facturación de 5,7 millones de euros, 1,4 más que el año anterior, pese a que el volumen de la producción en toneladas fue menor, según estadísticas pesqueras de primera venta de la Viceconsejería de Pesca del Gobierno de Canarias publicadas por el Centro de Datos del Cabildo.
En concreto, el volumen de la producción de pesca fresca en Lanzarote alcanzó el año pasado las 2.152 toneladas, mientras que en 2016 fue de 2.279. Sin embargo, aunque en este último año se pescó más, la facturación que se obtuvo fue sólo de 4,3 millones de euros.
Las capturas que más ingresos dejaron, en concreto 3.570.172 millones de euros con 1.822 toneladas, fueron las de especies pelágicas, entre las que se encuentran por ejemplo los atunes y las sardinas. De hecho, según otra estadística publicada por el Centro de Datos del Cabildo, los tunidos como el atún de ojo grande o patudo, el barrilote y el bonito listado fueron las tres especies más pescadas en la isla ocupante el 75,6%, seguidas en cuarto lugar por las sardinas, de las que se pescaron 71,6 toneladas.
En 2016, la pesca de especies pelágicas fue también las que más ingresos dejó, aunque bastante inferiores a los del año pasado. Y es que, entonces, aunque se capturaron 1.927 toneladas, sólo se facturaron 2,1 millones, es decir, 1,4 menos.
La captura de crustáceos y moluscos, las que menos ingresos dejaron
En cuanto a la pesca de peces demersales ésta dejó en Lanzarote en 2017 una facturación de 1,9 millones de euros con tan sólo 310,3 toneladas pescadas frente a las 335 pescadas en 2016, que dejaron unos ingresos de dos millones de euros. Entre estas especies se encuentran por ejemplo la sama, la vieja, el bocinegro y el mero, que ocuparon los siguientes puestos del ranking de especies más pescadas.
En cuanto a la captura de crustáceos, su producción sólo alcanzó las 15,6 toneladas en Lanzarote durante 2017, dejando unos ingresos de 179.448 euros, mientras que la pesca de moluscos como son por ejemplo los chocos, las lapas o los pulpos fue aún menor. Se capturaron sólo 3,6 toneladas facturándose 29.006 euros. En 2016, la producción de crustáceos había sido de 13 toneladas con una facturación de 124.554 euros y la de molustos de 3,6 toneladas con unos ingresos de 22.071 euros.
