"No hay una delimitación clara de zonas para practicar los deportes y las zonas de baño", afirma Santi, instructor de kite en la escuela Costa N-Oeste ante el aumento considerable de la práctica de este deporte

Las cometas en Famara buscan su sitio

Si antes el surf era una de las más importantes fuentes de ingresos de la localidad, el kitesurf se ha convertido, en los últimos tiempos, en la otra media naranja. Para la práctica de este deporte, "Famara es ...

11 de septiembre de 2007 (04:03 CET)
Las cometas en Famara buscan su sitio
Las cometas en Famara buscan su sitio

Si antes el surf era una de las más importantes fuentes de ingresos de la localidad, el kitesurf se ha convertido, en los últimos tiempos, en la otra media naranja. Para la práctica de este deporte, "Famara es increíblemente bueno por la dirección del viento, por lo larga que es la playa y por el espacio de arena que queda cuando está la marea baja", asegura Santi, que dirige la escuela de kitesurf Costa N-Oeste y que asegura que en Lanzarote no existe otro lugar mejor para practicarlo. Por eso, las escuelas que lo enseñan se han multiplicado en los últimos años en la localidad y cada vez se pueden ver más cometas de colores surcando los cielos.

Una playa para todos

El aumento de seguidores de este deporte mezcla de surf, windsurf y parapente ha causado algunos resquemores entre algunos de los usuarios de la playa de Famara. "Las cometas se acercan demasiado a la zona más cercana al pueblo donde se bañan las familias y como van tan deprisa da un poco de miedo que pierdan el control y caiga la cometa", cuenta José Luis, un padre de dos hijos preocupado por la falta de organización del espacio en la playa. Algo en lo que también coinciden Santi y Jaime instructores de kite.

"El problema es que no hay una delimitación clara de zonas para practicar los deportes y las zonas de baño", afirma Santi quien añade que además, en muchos casos, los deportistas no respetan los límites "imaginarios" que en su día puso el Ayuntamiento debido a que "la zona en que se supone que podemos practicar kitesurf es El Rincón que no tiene espacio de arena de playa, sólo hay piedras", afirma. La escuela que regenta Santi y Jaime es una de las principales afectadas y aunque no se sorprenden de que haya quejas entre los usuarios consideran que "no es más culpa de los deportistas que de las autoridades que no regulan esto".

La solución según los interesados debería pasar por la delimitación de una zona clara, informar a los turistas con carteles y señales de que existe una zona preferente "para que vayan con precaución porque puede ser peligroso", aseguran, aunque no sea de uso exclusivo para el kitesurf y otra zona para el baño donde los socorristas pudiesen controlarlo mejor. "En muchas playas europeas la zona de baño está perfectamente señalizada", asegura uno de los socorristas de emerlan al tiempo que se lamenta de la poca autoridad con que gozan en sus indicaciones, "nosotros intentábamos limitar a los deportistas que llegan muy cerca del pueblo pero nadie nos hace ni caso", concluye.

La solución que ha propuesto el concejal de deportes y juventud del municipio de Teguise, Víctor Barreto para conseguir "mediante consenso" regular el uso de la playa ha sido la de crear una asociación entre las escuelas tanto de surf como de kitesurf que regulen la zona mediante unos horarios de práctica de estos deportes porque según ha afirmado Barreto "si depende del Ayuntamiento va a ser un poco complicado que nosotros podamos regularlo a gusto de todos".

Mientras tanto, la salvaje playa de Famara, con sus seis kilómetros de longitud se resiste a asumir unas reglas de juego que la domen con unas instalaciones que permitan la seguridad de unos usuarios con diferentes formas de disfrutarla.

LO MAS LEÍDO