El Orientación Marítima se ha clasificado para disputar, los dos próximos fines de semana, la eliminatoria final por el ascenso a Segunda División B, después de haber superado cómodamente la primera fase de los play off, ya que el pasado domingo derrotó al Laguna a domicilio 1-2, y en casa ya le había ganado por 3 a 0.
El rival del Marítima en la última eliminatoria por el ascenso será el Granadilla, de Tenerife, que eliminó al Fuerteventura. Los tinerfeños empataron el pasado domingo a 2 en la isla majorera, después de haber igualado a 1 en su campo, con lo cual primó el valor doble en el desempate por average de sus dos goles a domicilio.
El primer partido de la eliminatoria definitiva se jugará el próximo fin de semana en Tenerife, y el segundo y último en la Ciudad Deportiva, ya que como en la clasificación de la Liga regular el Marítima (3º) había quedado por arriba del Granadilla (4º), eso da derecho a los lanzaroteño a jugar el encuentro final en su campo.
En el partido de este pasado domingo ante el Laguna, los tinerfeños se habían adelantado muy pronto en el marcador, con un gol de Elías de penalti en el minuto 7, pero Ito logró el empaste transitorio en el minuto 54, mientras que el lagunero Salvi marcó en propia puerta, poniendo el definitivo 1-2.
Esta será la primera vez en su historia que el Orientación Marítima jugará la segunda y última eliminatoria por el ascenso a Segunda División B, ya que si bien la temporada pasada -al igual que ahora, con Juan Antonio Machín como entrenador- ya se había clasificado para los play off de ascenso, había quedado fuera en la primera eliminatoria, ante el Tenisca.
Si el Marítima lograse ascender, sería un hito histórico no sólo para ese club, sino para todo el fútbol lanzaroteño, ya que nunca hasta ahora la isla tuvo a dos equipos en Segunda B, ya que la UD Lanzarote es sido el único que ha logrado militar en esta categoría.
Quien sí tiene experiencia en ascensos es el técnico Machín, ya que además de haber sido quien ascendió al Marítima a Tercera División, logró el segundo y último ascenso de la UD Lanzarote a Segunda B.
