La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha detenido en Lanzarote a una persona dentro de una nueva fase de la Operación Tosca, que se inició en Melilla pero tiene también ramificaciones en otras comunidades. En total este martes han sido detenidas 14 personas, 9 de ellas en Melilla, tres en Madrid, una en Málaga y la otra en Lanzarote, aunque su identidad no ha trascendido hasta el momento. Según ha informado la Guardia Civil, los arrestados están imputados por Delitos Contra la Administración Pública, y algunos también por delitos de Blanqueo de Capitales y Falsedad Documental.
Además, los investigadores entregarán en los próximos días citaciones a otros implicados para que comparezcan ante la Autoridad Judicial en calidad de imputados, según informa en nota de prensa la Guardia Civil.
Las investigaciones se iniciaron en 2013, cuando la Guardia Civil de Melilla, durante el desarrollo de una operación relacionada con Delitos contra la Salud Pública y Blanqueo de Capitales, intervino diversa documentación que evidenciaba el desvío de fondos públicos y otros actos de corrupción, en procedimientos de adjudicación de contratos públicos dentro de la Ciudad Autónoma de Melilla (Operación Opera).
Segunda oleada de registros
Tras estas primeras actuaciones y efectuadas varias detenciones de altos cargos de la ciudad autónoma y registros en distintas consejerías, a finales del año 2013 la UCO se hizo cargo de la investigación. En el mes febrero del año 2014, los investigadores realizaron nuevos registros en consejerías de Melilla, sociedades mercantiles vinculadas con los contratos investigados y en domicilios particulares.
Según la Guardia Civil, "tras el análisis de la documentación intervenida en estos últimos registros, se detectó la existencia de varias personas que fraudulentamente gestionaban fondos públicos en connivencia con funcionarios, cargos públicos y directivos de distintas empresas, viciando procesos de contratación y persiguiendo intereses personales o empresariales en lugar del interés general".
De estos desvíos de fondos y adjudicaciones de contratos, se habrían beneficiado económicamente las sociedades investigadas adjudicatarias de los contratos, detectándose igualmente la obtención de beneficios por parte de algunos de los funcionarios y cargos públicos.
La operación que está siendo dirigida por el Juzgado de Instrucción número cuatro de Melilla y la Fiscalía de esa Ciudad Autónoma, es llevada a cabo por el Grupo de Delitos contra la Administración de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, en colaboración con otras Unidades de las provincias afectadas.