La operación llevada a cabo por Asuntos Internos de la Policía Nacional en el sur de Tenerife ha destapado una red criminal que presuntamente operaba con apoyo interno de miembros del cuerpo, entre ellos Francisco Moar, exjefe de la Policía Judicial en Santa Cruz de Tenerife y figura clave en la apertura del caso Mediador también conocido caso Tito Berni. Moar, ahora jubilado, fue arrestado en Galicia, junto a otros dos agentes —uno aún en activo—, por su presunta implicación en delitos de narcotráfico, blanqueo de capitales, cohecho, organización criminal y revelación de secretos.
En el centro de la trama se encuentra Mohamed Jamil Derbah, empresario de origen libanés asentado en Canarias desde los años ochenta, vinculado al mafioso británico John Palmer. Derbah, que ya fue investigado en el pasado por estafas millonarias, fue detenido en Arona, su base de operaciones, donde gestionaba negocios inmobiliarios, turísticos y de seguridad.
El resto de detenidos son empleados del imperio de Derbah, entre los que se encontraría una abogada y uno de sus conductores y hombres de confianza.
El caso, declarado secreto por el Juzgado de Instrucción nº3 de Arona, sigue abierto y no se descartan más detenciones. La implicación de Moar reaviva viejas tensiones internas en la Policía Nacional, ya que fue él quien denunció por violencia machista al entonces comisario jefe provincial, Luis Felipe San Martín, actualmente suspendido. Esta nueva investigación pone en evidencia cómo antiguos enfrentamientos dentro del cuerpo se cruzan ahora con una presunta trama de corrupción con ramificaciones en sectores estratégicos de las Islas.
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