Los socorristas acuáticos de Cruz Roja en Playa Grande, Puerto del Carmen, han rescatado de una embarcación neumática de escasas dimensiones a dos menores de 8 y 10 años, de nacionalidad inglesa .
Según Cruz Roja, a las 10:43 de este martes, cuando ondeaba la bandera de color amarillo, con viento y corrientes en contra, un socorrista acuático observó una embarcación neumática de pequeñas dimensiones a la deriva con sus prismáticos, aproximadamente a unos 200 metros de la orilla. Inmediatamente avisó al vigilante más cercano a la posición de la balsa del suceso y éste se encargó de interceptarla y remolcarla hasta la orilla, con la colaboración de un familiar de las menores que se había percatado de la situación de riesgo y se había lanzado al agua. Afortunadamente las pequeñas se encontraban en perfecto estado y no fue necesario su traslado a un centro sanitario.
Desde Cruz Roja señalan que el motivo de que las niñas quedaran a la deriva estuvo en el descuido de los responsables de las menores, por lo que ha vuelto a hacer un llamamiento a la ciudadanía, recordando que el baño está prohibido cuando ondea la bandera roja y que, ante la bandera amarilla, como en este caso, se permite el baño con limitaciones, por lo que está prohibido en zonas donde el bañista no pueda permanecer tocando fondo y con la cabeza fuera del agua.
Asimismo, como durante el verano se suceden los motivos por los que los socorristas deben actuar tanto para realizar rescates como para realizar intervenciones de otro tipo, por lo que la ONG también reitera los consejos de evitar exposiciones prolongadas al sol sin protección solar; respetar las banderas de seguridad; bañarse en zonas vigiladas; vigilar que los niños pequeños no se bañen solos; no zambullirse en fondo desconocido; no nadar contra corriente o en zona de espigones; evitar adentrarse en zonas donde se toca fondo; no entrar bruscamente dentro del agua después de una prolongada exposición solar; evitar el baño después de las comidas; evitar el consumo de bebidas alcohólicas en la playa; salir rápidamente del agua si se notan escalofríos o dolores de cabeza; no poner a prueba o sobre valorar nuestra condición física en el mar; y siempre hacer caso de las recomendaciones de los socorristas.
