Un turista alemán de unos 42 años de edad fallecía este jueves en la playa de los Pocillos sin que los socorristas de Emerlan pudieran hacer nada por salvar su vida. Según explican desde la ONG, un testigo les alertó de la presencia de un varón tumbado en la arena, que al parecer estaba inconsciente.
Cuando los tres socorristas acuáticos acudieron al lugar indicado, encontraron al hombre en mitad de la playa junto a su esposa y, tras comprobar el nivel de consciencia, respiración y pulso, verificaron que se encontraba en parada cardiorrespiratoria, por lo que procedieron a realizar maniobras de reanimación.
Sin embargo, y aunque desde Emerlan explican que durante el transcurso de estas maniobras y debido a ellas, el hombre recobró el pulso varias veces, acto seguido volvía a perderlo. Tampoco el personal del Servicio de Urgencias Canario que se desplazó después hasta el lugar, tomando el relevo en las maniobras de reanimación cardiopulmonar, consiguió salvar la vida a la víctima, con lo que el facultativo de la ambulancia medicalizada del SUC solo pudo certificar su muerte.
En la zona se hicieron cargo de las diligencias la Policía Local de Tías y la Guardia Civil, hasta la llegada de la Autoridad Judicial.