Dos aviones F-18 se han estrellado en el mar, a 60 millas del sur de Gran Canaria, a primera hora de la tarde del martes. Los dos militares que los pilotaban han sido trasladados al hospital Insular de la capital de la isla, donde han sido ingresados con pronóstico menos grave, según fuentes sanitarias. Llegaron "orientados y caminando", aparentemente sin heridas.
Los pilotos fueron trasladados desde la Base Aérea de Gando, de donde habían salido con los aviones. El accidente se ha producido fruto de que ambos aviones se rozaron en pleno vuelo mientras hacían una maniobra.
Las dos aeronaves se encontraban realizando un ejercicio rutinario incluido dentro del Plan de Instrucción, cuando según las primeras informaciones, colisionaron en el aire cayendo posteriormente al mar. Las mismas fuentes han confirmado que los sistemas de emergencias de los aviones, la eyección en vuelo, funcionaron "a la perfección" así como el protocolo de rescate, dirigido por el Servicio Aéreo de Rescate (SAR).
En las maniobras no sólo estarían participando las aeronaves siniestradas, sino que formaban parte de una formación más extensa, sin que por lo pronto se haya podido confirmar el número exacto de aviones. El vuelo de entrenamiento está enmarcado dentro de las distintas fases de preparación para el combate de los pilotos, que se desarrollaba en una zona de exclusión áerea al sur de Gran Canaria denominada 'Delta'.
A pesar de que ya se ha puesto en marcha una investigación para analizar los restos y conocer las causas del accidente, un posible fallo hidráulico podría estar detrás de la colisión. El Ejército de Aire está en estos momentos intentando recuperar los restos del avión, para analizar los sistemas y las maniobras previas al choque.
Las mismas fuentes confirman que hasta que no se analice la información, no se podrán determinar con exactitud las causas que han originado esta colisión entre los dos aviones.
ACN Press