La Guardia Civil y la Policía Nacional, en el transcurso de la operación "Luna Nueva" llevada a cabo en las islas de Lanzarote y Fuerteventura, han detenido a 18 personas integrantes de una red que se dedicaba al tráfico de seres humanos y drogas. Los arrestados son seis españoles, once marroquíes y un congoleño.
Los agentes han intervenido más de 410 kilos de hachís, un kilo de metanfetamina y 300 gramos de cocaína. Además, se ha desmantelado en Arrecife un piso-laboratorio donde se adulteraba y cortaba la cocaína, según ha informado la Guardia Civil a través de un comunicado.
La Voz informó el pasado 9 de junio de que, al menos, nueve personas habían sido detenidas en la costa sur de Lanzarote, cuando intentaban introducir en la isla unos 120 kilos de hachís. En esos momentos, la operación se encontraba "bajo secreto de sumario", según fuentes policiales.
Según han informado este miércoles, las investigaciones se iniciaron tras tener conocimiento de la actividad delictiva que estaba llevando a cabo una organización criminal asentada en las islas de Fuerteventura y Lanzarote, según estas mismas fuentes. Tras establecer un dispositivo de vigilancia y control, en una primera fase se logró identificar a todos los miembros de la organización, lugares de residencia y ocio, vehículos que utilizaban para realizar los transportes de la droga y el modus operando utilizado.
Se comprobó que trasladaban el hachís y la cocaína por vía aérea desde Sudamérica en equipajes. "Además, introducían por las costas de Lanzarote a inmigrantes ilegales procedentes de Marruecos, los que, aprovechando el viaje en narcopateras, trasladaban partidas de hachís", ha informado la Guardia Civil.
En una primera fase de explotación de la operación, se intervinieron cerca de 280 kilos de hachís en dos vehículos estacionados en los muelles de Corralejo y Puerto del Rosario (ambos de Fuerteventura) y en el interior de un taxi que se hallaba en las proximidades. Se procedió entonces a la detención de varios de los miembros del grupo.
Continuando con la investigación, en los primeros días del mes de junio se tuvo conocimiento que el grupo pretendía realizar un viaje desde las costas de Marruecos hasta Lanzarote en el que trasladarían inmigrantes ilegales y una partida de hachís. Por ello, se estableció un dispositivo conjunto con agentes de Guardia Civil y de Policía Nacional para interceptar la embarcación.
Cuando la embarcación tipo patera arribó a la zona del Faro de Pechiguera, en el municipio de Yaiza, sus nueve ocupantes fueron detenidos, incautándoles otros 120 kilogramos de hachís que transportaban.
Un taxista daba cobertura a la red
Con la finalidad de pasar desapercibidos ante las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, la organización se valía de uno de sus miembros, de profesión taxista, que utilizando su vehículo trasladaba la droga y a los narcotraficantes como si se tratara de pasajeros que utilizaban este servicio.
Las investigación, dirigida por el Juzgado de Instrucción número 1 de Telde, en Las Palmas de Gran Canaria, ha sido llevada a cabo por agentes especialistas en la lucha contra el Crimen Organizado de la Comandancia de la Guardia Civil de las Palmas y agentes de la Comisaría de la Policía Nacional de Arrecife.
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