Una presunta agresión sexual tuvo lugar este miércoles de madrugada en la isla de La Graciosa. El agresor, un joven de 27 años, intentó violar supuestamente a una turista de la Península de 34 años, pero la rápida actuación de los vecinos de la zona, que alertaron a la Policía Local y a la Guardia Civil, impidió que se consumara la violación. El detenido, que podría contar en su defensa con el atenuante de un desequilibrio emocional, ha sido puesto a disposición judicial.
Los hechos sucedieron en la noche de este miércoles, 4 de enero. Un joven natural de La Graciosa se desplazó hasta Caleta de Cebo acechando a su víctima, una joven madrileña que se encontraba de vacaciones estos días junto a otros familiares.
Aprovechando un despiste, el joven intentó abusar presuntamente de la turista. Varios vecinos se percataron entonces del intento de agresión sexual, acudiendo en auxilio de la víctima e impidiendo que se consumara la violación. Los vecinos alertaron inmediatamente al vigilante y al único policía local de la isla de La Graciosa, pero el agresor ya se había dado a la fuga.
Los testigos presenciales pusieron entonces en alerta a la Policía Local de Teguise y a la Guardia Civil del Puesto de Costa Teguise, cuyos agentes acudieron a buscar al joven implicado. Minutos más tarde, un agente de la Guardia Civil dio con el agresor, un joven de 27 años sin antecedentes penales al que, aunque aún deben confirmarlos los servicios médicos, algún desequilibrio mental pudo haberle traicionado, lo que serviría como atenuante para su defensa.
Según fuentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en Lanzarote, el detenido fue trasladado hasta el cuartel de Costa Teguise en la embarcación Salvamar, y ha sido puesto a disposición del juez este mismo jueves por la mañana.
