Un joven de 25 años fue detenido el pasado sábado acusado de apuñalar y herir de gravedad a una joven de 19 años. El suceso ocurrió sobre las 8.30 horas, en un local del alterne del barrio arrecifeño de Altavista, según ha confirmado a La Voz la Policía Nacional.
Los hechos sucedieron en la calle Fray Luis León. El agresor, de nacionalidad rumana, al igual que la víctima, trató de huir pero fue localizado poco después por la Policía Nacional, que procedió a su detención. Por su parte, la joven de 19 años fue evacuada rápidamente en ambulancia al Hospital Doctor José Molina Orosa, donde ingresó en estado grave.
Este suceso ha despertado una gran preocupación entre los vecinos de Altavista. "Esto era un barrio tranquilo y humilde y ahora no", se queja una ciudadana. Esta mujer, que prefiere no facilitar su nombre, escuchó "un grito desgarrador" el sábado por la mañana desde su casa. Prefirió no asomarse, "porque pensaba que habían atropellado a un perro, y que lo habían matado". "Luego me enteré de que era un apuñalamiento", relata.
"La chica trabajaba en el local, que es un prostíbulo, aunque le pongan otro nombre", afirma esta vecina, que asegura que el apuñalamiento tuvo lugar "dentro del local, porque se veía el reguero de sangre en la puerta del local".
Esta mujer asegura que las "chicas que trabajan" en este local de alterne "no son conflictivas", pero sí lo son "algunos hombres", que salen ebrios del local, pegando "gritos por la mañana". "Hay botellas rotas en la acera, vómitos, se escuchan gritos? En este barrio nadie ha sido así", lamenta.
Y es que esta vecina no entiende por qué se le concedió licencia a este negocio. "Incluso hubo varias denuncias de vecinos porque no estaban de acuerdo con que se abriera este prostíbulo. Estoy segura de que el señor alcalde que dio la licencia, no lo hubiera permitido en su calle", critica. El local, según esta mujer, lleva abierto "más de un año", aunque estuvo cerrado "poco tiempo" durante las elecciones.
Esta vecina quiere que Altavista siga siendo "un barrio tranquilo". "Me da mucha pena que ya no lo sea. Aquí no vive gente rica y claro, esto se lo ponen a los pobres. Si el local hubiera intentado abrir en la calle Real, donde vive gente con poder adquisitivo, no lo habrían aceptado", afirma.