Francisco Gutiérrez reside en San Bartolomé, donde trabaja como médico. Sin embargo, a pesar de su condición de sanitario, afirma que apenas sabía nada del Síndrome de Asperger hasta que su hijo fue diagnosticado.Y es que, según explica Francisco, se trata de un trastorno de "reciente detección" y también recientemente reconocido por la Organización Mundial de la Salud.
De hecho, la primera vez que se habló del Síndrome de Asperger fue en 1944 cuando Hans Asperger, un pediatra y psiquiatra austriaco, publicó la primera definición sobre este trastorno. Tras esto, explica Francisco, "se dejó un poco apartado y después del 90 se empezó a hablar de Asperger".
"Ahora ya está bien estudiado pero hasta el año 2005 en Lanzarote casi nadie sabía nada. Ni los sanitarios, que yo soy uno de ellos, ni los especialistas que se dedican a ello. Ahora ya se han preparado y en Lanzarote ya se puede tratar y diagnosticar bien".
Por ello, una de las funciones principales de Aspercan Canarias, asociación de la que Francisco fue vocal durante tres años y en la que sigue participando activamente, es dar a conocer el síndrome, dando charlas en los colegios, organizando jornadas y a través de su presencia en los medios de comunicación.
La asociación, que tiene su sede en Las Palmas de Gran Canaria, se creó en el año 2005 y actualmente cuenta con cerca de 40 familias asociadas, de las que sólo cuatro niños son de Lanzarote. "Aquí en la isla hay más casos e intentamos que poco a poco la gente se vaya asociando", señala Francisco.
De hecho, una de las actividades que desde la asociación quieren llevar a cabo en la isla es la realización de talleres de habilidades sociales. "Aquí no abarcamos tanto y las edades son más pequeñas, pero queremos hacer que se valgan por sí mismos", explica Francisco. También quieren preparar monitores para realizar excursiones y campamentos. "Ahora estamos en eso".
